El público del plató también paga

Pagar por asistir como público a un programa. Esta es la nueva fórmula que aplicará Telecinco en la grabación de los cuartos de final de La voz, el talent show que conduce Jesús Vázquez y que se ha convertido en uno de los buques insignia de la cadena de Mediaset. Así se puede comprobar en su página web. En su Taquilla ya se han puesto a la venta las entradas para el evento, aunque todavía no se sabe el día en el que se iniciarán las grabaciones. El precio total, 45 euros. Esta entrada, denominada Vive la voz, incluye asiento numerado, acceso al plató por una entrada exclusiva, traslado ida y vuelta en autobús desde el centro de Madrid, una bolsa de picnic, merchandising y atención personalizada por azafatas de Taquilla Mediaset.

Este modelo no es nuevo. En la televisión norteamericana y en algunas europeas (por ejemplo, Holanda) es práctica habitual que el público pague por asistir a los programas presentados por las grandes estrellas mediáticas. En España, ya se había dado el caso (El club de la comedia cobraba 10 euros por entrada), pero ahora Telecinco ve una “nueva línea de negocio”, reconoce Ana Bustamante, directora comercial de Mediaset. La idea nació “hace ya nueve meses, cuando vimos la demanda interna de invitaciones y compromisos que había para asistir a las galas. Era un caos. En ese instante pensamos: ‘Aquí hay negocio, hay interés por asistir a este espectáculo”.

Las entradas salieron este martes a la venta y se ha liquidado ya el 60%

A partir de ese momento el departamento comercial de la cadena se puso a trabajar en una idea que tenía muchos problemas legales y administrativos. “Nueve meses de papeleo y consultas para abrir una línea de negocio que podía ser rentable”, señala Bustamante. Además, “en Holanda, el país dueño del formato La voz, ya se vendían entradas. No estamos haciendo nada que no se hubiese ya testado en otros países”. La diferencia es que ahora, Mediaset ofrece un paquete exclusivo que incluye una atención personalizada (viaje, comida, regalos, azafatas...). “Damos un trato exclusivo y el dato que demuestra que La voz tiene demanda es que hoy hemos sacado las entradas a la venta y ya se ha vendido el 60%, además sin saber el día en el que se celebrará”, añade. Pero Mario García de Castro, profesor de Comunicación Audiovisual de la Universidad Rey Juan Carlos, opina: “Con la cultura del todo gratis instaurada en España será difícil que este modelo sobreviva. Este formato es un evento mediático que tiene actuaciones en directo y un público dispuesto a pagar como si se tratase de un concierto de tu ídolo, un show artístico donde participan famosos. No pienso que sea un sistema exportable a otros programas”.

El presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC), Alejandro Perales, entiende que las televisiones busquen vías de ingresos alternativas a la publicidad, como hacen con la teletienda. La voz dice, “es un programa que genera mucha expectación. Tiene un contenido de espectáculo musical”. Por eso no critica que cobre al público que asiste al plató. “Tiene un plus, y dado que hay una demanda importante para asistir a estos programas, no me parece mal que la cadena incremente sus ingresos por esta vía”.

Así, en la primera gala de cuartos de final de La voz convivirán tres tipos de público diferentes: los que pagan (un 40% del total), a los que les pagan y los compromisos de la cadena (60% entre los dos). Unas cifras que auguran un buen negocio para las cadenas si esta práctica se hace habitual y se pasa de pagarle al público (una costumbre que ha decaído en los últimos años por los ajustados presupuestos que manejan las productoras) a pagar por asistir a un espectáculo. Un espectáculo que, en el caso de La voz, se cimienta más en ver a Jesús Vázquez y a los coaches (Bisbal, Malú, Rosario y Antonio Orozco) que en seguir a los concursantes, como quedó probado con la suspensión de la gira con los participantes del año pasado.

Pero, por ahora, va a ser un hecho “puntual, no vamos a hacerlo extensible a cualquier programa, pero sí estaremos muy pendientes de comprobar qué programas tienen esa demanda extra (una final de Gran Hermano o un personaje que aparezca en Sálvame). Si es así, ¿por qué no lo vamos a poner en venta?”, comenta Ana Bustamante. “Aunque es algo experimental, no cabe duda de que podemos estar delante de un cambio de modelo”, concluye la directora comercial de Mediaset.