Duelo de aristócratas británicos
La BBC planta cara al éxito de 'Downton abbey' con la ambiciosa miniserie 'Parade's end', basada en la magnífica tetralogía del escritor Ford Madox Ford
Encarar la competencia de otras cadenas a base de calidad sigue siendo la consigna que ha guiado a la BBC en la producción televisiva de la serie Parade’s end, basada en la magnífica tetralogía del novelista inglés Ford Madox Ford, adaptada para la pequeña pantalla por el dramaturgo Tom Stoppard e interpretada por uno de los actores jóvenes más sólidos del panorama británico, Benedict Cumberbatch.
El desconcierto de la aristocracia inglesa ante los cambios que arrastra consigo la llegada del siglo XX marca una historia de pasiones y dramas familiares en el contexto de la I Guerra Mundial, que alterará para siempre los valores de la clase privilegiada… El argumento, en líneas generales, del drama histórico que el ente público británico estrenará el próximo día 24 aparecería casi calcado al de ese fenómeno televisivo que la ITV lleva emitiendo desde hace dos años, Downton abbey, con el aval de audiencias millonarias. Esta última serie, que en España se ha podido ver en Antena 3, ha conseguido fulminar en su franja a cualquier otro canal rival, incluida la BBC, a pesar de los tintes de culebrón que adquirieron los avatares de la familia del conde de Grantham en la última temporada.
Frente al creciente y exitoso sesgo folletinesco de Downton abbey, solo la cadena pública podía atreverse para su horario estelar con una obra tan ambiciosa y compleja como Parade’s end, habitada por personajes muy sofisticados o, según la definición del propio Cumberbatch, “tridimensionales”. Reciente ganador del Premio Olivier —el Oscar del teatro británico—, el actor que se labró el reconocimiento internacional con la heterodoxa adaptación televisiva del personaje de Sherlock Holmes vuelve a asumir el papel protagonista en la nueva serie, un aristócrata con los aires feudales de un terrateniente, brillante estadista y, por encima de todo, férreo defensor de las esencias victorianas.
El artífice de esa criatura literaria, el novelista, poeta, crítico literario y editor Ford Madox Ford (1873-1939), lo concibió como “el último tory”. Atado por su rancio concepto del honor a una esposa adúltera que lo desprecia (interpretada por la también emergente Rebecca Hall), el personaje de Christopher Tietjens acaba asistiendo a la desintegración de sus ideas sobre la patria, el matrimonio o la necesidad de reprimir el deseo, a partir de su experiencia en las trincheras francesas y de su relación sentimental con una sufragista de la época (papel que recae en la debutante actriz australiana Adelaide Clemens). Solo traducida al español hace tres años, Parade’s end (El final del desfile) encarna el tránsito desde el romanticismo hacia el modernismo, según su actor principal.
Coproducida con la cadena estadounidense HBO, que aporta la mitad de sus 12 millones de libras (más de 15 millones de euros) de presupuesto, la serie cuenta además con un guionista de lujo, Tom Stoppard, considerado uno de los grandes dramaturgos británicos contemporáneos (Rosencrantz y Guildenstern han muerto, Rock n’Roll…). En su primer trabajo para la BBC desde 1979, Stoppard ha aceptado el reto de trasladar al formato televisivo una obra trufada de sutiles ambigüedades morales y complejas metáforas históricas, con la dificultad que ello entraña para atraer a grandes audiencias.
Quizá por ese motivo el primero de los cinco capítulos que conforman Parade’s end va a ser emitido estratégicamente a finales de agosto, esto es, pocas semanas antes de que arranque la tercera temporada de la popularísima Downton abbey, ganadora de cuatro premios Emmy al otro lado del Atlántico. Habrá que esperar pues al otoño para asistir a ese duelo entre aristócratas que va a dirimirse en las pantallas de la televisión británica.
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