Los ‘jets’ y los ‘sharks’ se citan en duelo en Madrid

Leonard Bernstein habría cumplido 100 años este sábado. Él no ha podido llegar a tan provecta edad, falleció 28 años antes en su apartamento del edificio Dakota de Nueva York, el mismo donde asesinaron, una década antes, a John Lennon. Su obra, sin embargo, es inmortal. Especialmente West Side Story, de 1957, al que muchos se refieren como el musical más célebre de la historia. "Marcó un antes y un después tanto en el teatro como en el cine", comenta Federico Barrios, director de esta nueva versión. Una adaptación del clásico shakespeariano Romeo y Julieta en los suburbios neoyorquinos de mediados del siglo XX que se estrena el 3 de octubre en el teatro Calderón (Atocha, 18).

La que se podrá ver en algo más de un mes es la segunda producción genuinamente española. La primera vez que se montó en España fue en el teatro Tívoli de Barcelona bajo la dirección de Ricard Reguant, en 1996, un montaje que giró por el país. La obra tuvo entonces como referencia la versión cinematográfica de 1962, que introducía cambios respecto a la obra original. Para la de Madrid, que se enmarca en los actos internacionales de conmemoración del centenario de Bernstein, Barrios se ha fijado en el libreto original del 57. El texto, elaborado por Arthur Laurents y por un joven Stephen Sondheim, autor de Sweeny Todd, ha sido adaptado por David Serrano, director y guionista que ya hizo lo propio con Billy Elliot e ideó el argumento del musical de Mecano Hoy no me puedo levantar.

El papel protagonista de esta trágica historia de amor llena de baile y música es para Talía del Val, actriz y cantante que ha encarnado a Bella en el musical de Disney La Bella y la Bestia y ha creado una de las Cosettes más solventes en la última producción española de Los Miserables. Junto a ella, en el papel de Tony (Romeo), estará Javier Ariano, uno de los actores de La edad de la ira la aclamada obra de Nando López.

La pareja estará acompañada por 34 actores, cantantes y bailarines y arropada por una orquesta de 20 músicos, algo poco habitual en los musicales que se programan hoy en los teatros españoles, que tienden a reducir las bandas a lo esencial. Las vibrantes coreografías, que rezuman danza clásica, contemporánea, jazz y ritmos latinos, se basan en las que creó Jerome Robbins para el estreno. “Casi al 100% porque algunas cosas hemos tenido que adaptarlas por cuestiones de espacio, porque la escenografía que tenemos aquí, no es igual que la original, así que hemos tenido que hacer unas pequeñas variaciones que no afectan a la gran obra maestra que dejó Robbins”, agrega Barrios, que ya trabajó como director residente y coreógrafo en la última producción de Cabaret.

Esa misma autenticidad es la que quieren transmitir con el vestuario, confeccionado con tejidos vintage. “Lo estamos realizando en talleres especiales con el objetivo de que pueda utilizarse para la danza”, explica el director. La escenografía, creada por Ricardo Sánchez Cuerda, habitual en la productora de West Side Story, Som, es completamente nueva. “Se ha pensado para que el público, nada más se levante el telón, sienta que está en Nueva York de los cincuenta con los balcones, las escaleras características, la típica estampa que tenemos en la cabeza sobre esa ciudad”, concluye Barrios.

Otoño musical

West Side Story no estará solo en la cartelera madrileña. Se repartirá a los espectadores con la producción de Anastasia, en el Teatro Coliseum (Gran Vía, 78), basada en la película de 1997 que cuenta la historia de la última heredera de la dinastía Romanov con los jóvenes actores Jana Gómez e Íñigo Etayo. Es la primera vez que una superproducción de Broadway se estrena antes en Madrid que en Londres. La capital cuenta también con el estreno absoluto de la adaptación de la novela de Noah Gordon El médico, en el teatro Nuevo Apolo (Plaza de Tirso de Molina, 1). La música ha sido compuesta por Iván Macías, responsable del Liceo Municipal de la Música de Moguer, que ya ha creado musicales como Germinal, la dirección es de José Luis Sixto y el vestuario del mediático diseñador Lorenzo Caprile. También llega 33 el musical, una obra que se centra en la vida de Jesucristo, creado por el sacerdote Toño Casado, desde un punto de vista diferente al del Jesucristo Superstar de Webber. Para su representación se ha montado el Espacio 33, un teatro construido ad hoc en Ifema.

El toque de comedia lo pondrá Let's Go Company con su versión de El jovencito Frankenstein de Mel Brooks (Los productores) a partir de noviembre en el teatro de la Luz Phillips Gran Vía (Gran Vía, 66). Rematan la cartelera El rey león que arranca su octava temporada en el teatro Lope de Vega (Gran Vía, 57) y Billy Elliot que se lanza a por su segundo en el Nuevo Teatro Alcalá (Jorge Juan, 62).