Las cuevas de Montserrat explican su historia en 3D

Por unos segundos la oscuridad envuelve el corazón de Montserrat. Las luces que habitualmente señalan el recorrido a los visitantes que se dejan engullir por la Cova del Salnitre se apagan. De repente, un destello luminoso parece resquebrajar la roca milenaria. Ante la reducida comitiva de visitantes y a unos diez metros, parecen revivir los primeros hombres que miles de años atrás se refugiaron en las mismas grutas. Sus siluetas interactúan alrededor de la pequeña expedición, antes de desvanecerse por completo.

Ahora son unos monjes medievales del siglo XVI los que entran en escena. Explotan las grandes cantidades de salitre que nace de la combinación química entre la roca calcárea y excrementos de los murciélagos que durante un siglo colonizaron estas galerías. Desde hace una semana las paredes de las cuevas de Montserrat hablan. Un logrado montaje audiovisual con tecnología láser cuenta la evolución de la montaña y de sus cuevas, nacidas tras el goteo de la lluvia, que durante millones de años erosionó y agujereó el macizo para crear la Cova del Salnitre, una de las tres galerías que forman las cuevas de Montserrat.

Tras superar los primeros 244 escalones que separan Collbató de la cueva y antes de emprender la visita guiada de 500 metros de recorrido, el Ayuntamiento propone descubrir la historia de Montserrat a través de un espectáculo en 3D que nos sumerge en los principales episodios del que ha sido testigo la cordillera, donde descansa la virgen de la Moreneta.

Con la música original de Francesc Gener, los 1.600 vatios de potencia del equipo instalado nos trasladan, en un nuevo salto de tiempo, a la entrada de las tropas de Napoleón en Cataluña a su paso por la descomunal sierra de piedra de 50 kilómetros cuadrados. Una sombra reproduce la famosa leyenda de Mansuet en la que este herrero ahuyentó a unos despavoridos<MC> soldados borbónicos gracias al estruendo que causaban los utensilios metálicos que el artesano dejaba caer por la Cova del Salnitre, que lleva el nombre del mineral que los monjes vendían y con el que se fabricaba pólvora.

El montaje, reproducido en la pared de la gruta, se podrá ver de manera oficial a partir del 3 de febrero con el objetivo de dejar atrás las 21.000 visitas anuales y llegar hasta las 30.000. El alcalde Collbató, Miquel Solà, mantiene que esta, es la primera experiencia de videomapping en una cueva. Desde la gruta, Solà presentó el jueves el montaje que, de momento, no supondrá un incremento a los 7,50 euros que cuesta la entrada general.

La peripecia audiovisual de Wasabi Produccions, que ha rodado escenas con actores reales, se ha conseguido escaneando todo el relieve de la cueva para adaptar la proyección a la cueva y crear, así, el efecto en tres dimensiones. Tras el visionado, el visitante continuará la ruta guiada habitual que se adentra hasta 20 metros de profundidad para descubrir las curiosas estalagmitas que inspiraron la Sagrada Familia de Antoni Gaudí.Los más creyentes se sorprenderán con la mismísima Moreneta que emerge entre las sinuosas formas de la roca.

Tras un año de obras, con dificultades para hacer llegar la corriente eléctrica que necesitan los dos proyectores principales, y otros 20 proyectores led, los visitantes podrán explorar, en una semana, la historia de Montserrat desde las entrañas de un macizo, que inspiró a artistas como Santiago Rusiñol, Ramón Casas o mossèn Cinto Verdaguer.