La CUP propone rescatar 760 millones de los Presupuestos para fines sociales

El Gobierno catalán respiró este miércoles con el inicio del trámite del proyecto de Presupuestos pero no tiene por ahora garantizado el apoyo de la CUP. Los diputados anticapitalistas permitieron con dos de sus votos que las cuentas superaran este miércoles el primer trámite parlamentario pero han presentado enmiendas para modificar sustancialmente el cariz del proyecto. Su objetivo es reubicar 760 millones de euros y asignarlos ahora a 11 fondos sociales para incrementar la cohesión social, territorial y ecológica. Tras resignarse a la decisión del Ejecutivo de no aumentar el IRPF a las clases más altas, la CUP ha pasado a un plan b y quiere potenciar la dotación social sin necesidad de aumentar ingresos con diversas medidas como la rebaja de la retribución de los altos cargos o la reducir las partidas destinadas a la externalización.

La CUP no tomará una decisión definitiva sobre las cuentas hasta una reunión el próximo 28 de enero pero Reguant se ha negado en redondo a entrar en el debate sobre "líneas rojas" y, por tanto, a alimentar ya la tensión de hace seis meses. Su estrategia es que el Ejecutivo catalán tiene todavía margen de maniobra para incidir en el cariz social del proyecto y ha mantenido las distancias cuando se le ha planteado que el Gobierno mantiene su decisión de que sin presupuestos, habrá elecciones. "Es legítimo que lo digan pero hace tiempo que decimos que no se mezclen las dos cosas y se caiga en el chantaje. El referéndum no es una concesión a la CUP. Es algo para todo el país", ha sostenido la diputada en declaraciones en el Parlament.

Los anticapitalistas consideran que su plan es viable y proponen varias vías para rescatar las partidas. La principal es revertir 293 millones de euros destinados a las externalizaciones de servicios públicos -en el caso de sanidad se trataría de rebajarlas un 10%- ; lograr tres millones procedentes de reducir el 19% de las retribuciones de altos cargos y cargos de confianza, que se destinarían íntegramente a la renta de garantía ciudadana; eliminar los conciertos educativos a las escuelas que segregan por sexo (esa partida ha aumentado en 55 millones); reducir los gastos en protocolo u obligar al Gobierno a someter a control parlamentario cuando quiera a avalar a empresas por valor de más de 10 millones de euros. Reguant ha subrayado su rechazo a que se conceda esas ayudas a la empresa que explota el circuito de Montmeló por mucho que sea deficitario al recordar que la de Ecclestone es una empresa "multimillonaria" como para necesitar de ayudas públicas.

No queremos hablar de líneas rojas ni en esos términos", dice Reguant en alusión al futuro de los Presupuestos

Los 11 fondos sociales que plantea la CUP son los siguientes: la lucha contra el fraude fiscal; el de la educación (54 millones); el fondo de la gestión pública -que se dotaría reduciendo un 10% las externalizaciones; el de la renta garantía ciudadana (45,4); de vivienda -dotado de 41 millones y procedente del Departamento de Territorio-; la creación de una banca pública; un banco de tierras públicas; el fondo de ayuda a la cooperativismo (180 millones); de políticas de igualdad y contra la violencia machista -se abastecería reduciendo los gastos en el capítulo de protocolo. Los ingresos se obtendrían en buena parte del  Departamento de Territorio y del presupuesto "estratosférico" destinado al Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de las Información (CTTI) o del Incasol.