Sant Jordi en Lleida, la lucha contra el intrusismo

Lleida ha celebrado hoy un Sant Jordi multitudinario en el que el buen tiempo ha acompañado durante toda la mañana. Pese a que la Diada ha coincidido en sábado, los leridanos se han podido perder por muchas menos paradas que en otras ediciones. Este 2016 es uno de los años con mayor número de novedades editoriales locales en Ponent y, a pesar de que la proliferación de títulos leridanos acompaña, el Ayuntamiento de Lleida ha autorizado sólo 190 paradas de libros, rosas y otros artículos mientras que en 2015 fueron 235. La Paeria no ha dado permiso a una veintena de paradas que no se ajustaban a la ordenanza fiscal. Una petición histórica de las floristas de Lleida que siempre afrontaban Sant Jordi con resignación y denunciando el gran intrusismo que se vive en la ciudad.

La leyenda de Sant Jordi siempre va emparejada con otra que asegura que cada año que el 23 de abril cae en fin de semana va unido a una reducción de ventas. Los floristas, pese a haberse deshecho de la competencia desleal, aseguraban hoy que las ventas se reducirían ya que con las oficinas y los colegios cerrados no se adquirirían el mismo número de flores que otros años. Durante la semana, la presidenta del Gremio de Floristas de Lleida, Anna Balanyà, ya anunció en repetidas ocasiones que la reducción de ventas puede rozar el 20% en uno de los días más importantes para el sector.

En Lleida las paradas se han distribuido como es tradicional a lo largo del Eix Comercial y en la Rambla Aragó. Ya no sólo se venden libros y rosas sino que también hay lugar para la artesanía y para el pan de Sant Jordi que, año tras año, y ya van 25, el Gremio de Panaderos de las Tierras de Lleida han convertido en tradición. Un pan elaborado con queso, sobrasada, pasas y nueces de los que se prevé haber vendido 25.000 unidades.

Estas últimas semanas se han presentado una veintena de libros de autores de la provincia. Según el Gremio de Libreros de Lleida, este año, además de otras propuestas, se pueden adquirir en torno a 450 títulos de autores locales. Hay varios libros que despuntan, como Amb X de sexe del periodista David Marín y la política convergente y escritora Marta Alòs. Se da la circunstancia de que Alòs ya había publicado en 1997 con el político de ICV Francesc Pané un libro de relatos eróticos, La mano al ombligo.

Entre los libros más buscados este sábado por la mañana se encontraba Pacte de silenci, en el que Llorenç Capdevila mantiene en vilo al lector con un thriller rural. Para los más empíricos, este año la Universitat de Lleida ha publicado Una gran ciutat tota per descobrir, una nueva propuesta de guía de la ciudad. La novela negra del exalcalde de les Borges Blanques, Miquel Àngel Estradé, L’assassí que llegia Vidal Vidal muestra una historia ambientada en Lleida en la que el protagonista, un asesino en serie, lee a otro escritor leridano: Vidal Vidal.

Pero sin duda, los libreros apuestan por que entre los más vendidos se encuentren el libro Li deien Pare, donde Carles Porta relata el caso de pedofilia de Castelldans, y el libro Sóc de l’Oest, del Sr. Postu, una especie de superhéroe leridano capaz de escribir con humor situaciones que sólo se viven en el Oeste de Cataluña.

Como cada año, los leridanos han hecho suyas las ciudades y los pueblos para celebrar una Diada repleta de libros y rosas.