Barcelona aprueba privatizar los garajes más rentables y ampliar La Maquinista

Algunos de los concejales del Ayuntamiento de Barcelona se despedían ayer deseándose “buenas vacaciones”. El pleno de ayer sirvió para cerrar la temporada y dar carpetazo a temas que se han discutido durante todo el año y que van a cambiar notablemente la ciudad de Barcelona. Dos ejemplos son la adjudicación de la gestión de un 60% de los 26 aparcamientos más rentables a la empresa SABA durante 25 años y la ampliación de 42.000 metros cuadrados de la superficie del centro comercial La Maquinista, que irá acompañada de la construcción de 625 viviendas. Los dos puntos se aprobaron gracias a los acuerdos entre CiU y el PP y, en el caso de los aparcamientos, también con el apoyo de ERC. En el pleno también se aprobó por silencio administrativo la ampliación del centro comercial de Les Glòries. Este y La Maquinista son propiedad de grupo Unibail-Rodamco.

El punto del pleno que más polémica provocó fue el de la ampliación de La Maquinista, que cuenta con el rechazo de todas las asociaciones de comerciantes y vecinos de la ciudad. El teniente de alcalde de Hábitat Urbano, Antoni Vives, defendió que la ampliación y las nuevas viviendas “crearán tejido urbano” y permitirán unos ingresos que desencallarán los equipamientos sociales previstos y la construcción de la guardería La Maquinista. El presidente de ICV-EUiA, Ricard Gomà, denunció que este argumento “es un chantaje inadmisible”, mientras que Jordi Potabella (ERC), criticó que se trata de un “cambio de modelo” que complicará la existencia de los comerciantes. Desde el PSC, Imma Moraleda criticó también la pérdida de suelo industrial que supone la recalificación. El concejal popular Eduardo Bolaños recordó que fueron los anteriores gobiernos los que construyeron el centro comercial.

El pleno también aprobó ayer la ampliación de 11.000 metros del centro comercial Les Glòries por silencio administrativo. Tras las críticas de PSC, ICV-EUiA y ERC de utilizar está fórmula que impide el debate político, el líder del PP, Alberto Fernández Díaz, recordó que el gobierno socialista utilizó el mismo sistema en 1997 para aprobar, ni más ni menos, la construcción de La Maquinista.

El pleno también dio el visto bueno definitivo a la privatización temporal de 26 aparcamientos municipales también provocó un intenso debate. PSC e ICV-EUiA recordaron que el Ayuntamiento de Barcelona no necesita privatizar los aparcamientos porque ha tenido un superávit de 200 millones de euros en dos años. La privatización del 60% de la nueva empresa comportará unos ingresos de 232 millones.

Sin pistas de esquí

Los partidos de la oposición frenaron ayer el debate y paralizaron la intención del Ayuntamienmto de construir una pista de esquí artificial al estilo de Dubái en la Zona Franca, en un solar ocupado actualmente por un instituto y la sede del Banco de los Alimentos. El Gobierno local —que está en minoría— decidió no incluir en la orden del día la modificación urbanística necesaria para tirar adelante la pista de esquí, consciente de que perdería la votación.

A preguntas de los periodistas, todos los partidos de la oposición criticaron la idea. El socialista Jaume Collboni lo consderó una “broma de mal gusto” y recordó que lo necesita el barrio de La Marina es “la llegada del metro”. Alberto Fernández Díaz, del PP, lo calificó de “soprendente e inaceptable” mientras que ICV-EUiA advirtió que solo beneficaría a intereses privados. Alfred Bosch, de ERC, dijo: “Que yo sepa, Barcelona no es Dubái”.

La V de victoria frustrada

ERC logró incluir a última hora una propuesta para reclamar que Barcelona apoye los actos del próximo 11 de septiembre, que incluyen la formación de una gran V humana como símbolo de la victoria y para reivindicar la votación de la consulta. El resto de partidos aceptaron incluir la propuesta —que tenía el sí garantizado con los votos de CiU, ICV-EUiA y ERC— pero los socialistas pidieron que la votación fuera nominal y como faltaban dos concejales del bloque del sí(Raimond Blasi, de Unió, y Elsa Blasco, de ICV), la medida quedó rechazada. Tras perder la votación, Portabella lamentó la “deriva nacionalista española” del PSC.

Poco antes de que empezara la votación el bloque del sí descubrió que estaba en minoría y avisó a los concejales que faltaban para que regresaran al hemiciclo. La cuarta teniente de alcalde, Maite Fandos, quiso correr tanto que se cayó al suelo. Finalmente, pudo votar pero no sirvió de nada.

Perros sueltos hasta 2016

La sesión plenaria también aprobó con los votos de CiU, PSC y ERC y la abstención de ICV-EUiA la nueva ordenanza de protección y venta de animales. El texto, defendido por el concejal convergente Jordi Martí, implica un nuevo paso adelante del Ayuntamiento hacia la protección animal. Uno de los puntos más polémicos de la ordenanza es la que obliga a llevar al perro atado aunque, finalmente, se ha aprobado una moratoria de 18 meses antes de aplicar ninguna sanción por llevar al animal suelto. En este tiempo, el Gobierno local tendrá que abrir nuevos espacios donde se puedan soltar a los perros.

La nueva ordenanza también incluye a propuesta de ERC realizar un fichero de personas que hayan maltratado a algún perro o gato, para impedir que puedan comprar o adoptar cualquier animal. A partir del 1 de octubre, Transports Metropolitans de Barcelona permitirá la entrada de perros en el metro si llevan bozal y correa.