Un muerto y tres heridos de una misma familia en una reyerta en Armilla

Un hombre de 31 años ha muerto degollado esta mañana por dos hombres que accedieron a su vivienda de Armilla (Granada), donde también han resultado heridos graves por arma blanca su esposa y sus dos hijos, de siete y diez años. Los tres están ingresados en un hospital de Granada. La policía sospecha que el suceso podría tener relación con un ajuste de cuentas por supuesto tráfico de droga, aunque no se descartan otras líneas de investigación. Sí se ha confirmado que no falta nada de la vivienda, por lo que el robo no se incluye como hipótesis.

El suceso, que fue confirmado por los servicios de emergencias y la Guardia Civil, ocurrió pasadas la una y media de la madrugada en la localidad del área metropolitana de la capital granadina. Las víctimas son vecinos de este municipio desde hace tiempo.

La familia reside en una vivienda de la calle Tarragona, donde se registró la agresión de madrugada. Dos hombres, según las primeras declaraciones de la esposa del fallecido a la Guardia Civil, entraron en la casa y se desató una violenta pelea.

Durante esta reyerta, el hombre fue degollado y su esposa y los niños, que permanecen en la Unidad de Cuidados Intensivos, heridos.

Cuando los asaltantes abandonaron  la vivienda, la mujer avisó a un vecino, quien alertó a la Policía Local. La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación y ha detenido a tres sospechosos tras haberlos llevado a interrogar.

En el momento de los hechos había también en la vivienda un hermanastro del fallecido que al parecer huyó, según el subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez.

Nieves Uribe, vecina de las víctimas, ha relatado que la mujer acudió de madrugada a su vivienda "ensangrentada" pidiendo auxilio para su marido y sus hijos.

Poco después, ha dicho, llegaron los efectivos policiales y la ambulancia que trasladó al cuerpo sin vida del hombre, mientras que a ella, que según la vecina no quería apartarse de su marido, se la llevaron en otro vehículo sanitario.

La vecina asegura no haber tenido "jamás" ningún problema con esta familia, que llevaba "muchos años" viviendo en el barrio.

Fuentes sanitarias han informado a Efe de que el pronóstico de los menores es "reservado": el de 7 años permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital San Cecilio, donde también está su madre en Observación, y el de 10 años está ingresado en el Hospital Materno, en planta, aunque según el subdelegado parece que podrán salvar la vida.