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El juicio por la explosión en Azcárraga acaba con altas peticiones por daños

La fiscal solicita una indemnización de más de dos millones de euros También pide seis meses de prisión para los dos acusados

Cristina Vázquez

El juicio por la explosión pirotécnica ocurrida en 2007 en la falla de Azcárraga-Fernando el Católico, en la que hubo una veintena de heridos y cuantiosos daños materiales, ha quedado listo para sentencia. La fiscal se ha ratificado en su petición de más de dos millones de euros -el principal más los intereses de demora- y los seis meses de prisión para los dos acusados, Bernardino Peris, de la Pirotecnia Quilis y el entonces presidente de la falla, Antonio Badía. Como responsables civiles subsidiarios aparecen la empresa pirotécnica y la comisión fallera.

El caso, ocurrido en las fiestas falleras de hace cinco años, ha tomado especial trascendencia por las elevadas indemnizaciones solicitadas por el ministerio fiscal y los abogados de los perjudicados. Las pólizas de las aseguradoras de la pirotecnia, la falla y del Ayuntamiento -que también responde parcialmente en estos siniestros- sumarían 1,4 millones de euros de indemnización. El resto correría a cargo, siempre en función de la sentencia, de la pirotécnica de Caballer e incluso de los falleros.

El suceso ocurrió el 16 de marzo de 2007 y provocó unos 20 heridos y daños en las viviendas y bajos de la calle. De hecho, ha sido uno de los juicios más concurridos, con más de 450 testigos, 50 acusaciones particulares y un mes largo de juicio. La lectura pública del veredicto se conocerá el 10

Enrique Soler, abogado del expresidente de la falla ha pedido la libre absolución de su defendido porque la comisión solo iba a disparar una traca para la que tenía los debidos permisos y que podía manipular cualquier adulto mayor de 18 años. "Mi defendido no conocía el contenido de la furgoneta y por tanto no podía pedir medidas de precaución para algo que desconocía". La intervención del presidente no influyó en el estallido de la furgoneta, de hecho, la traca aérea contratada por la falla de Azcárraga fue la única pólvora que no estalló cuando ocurrió el siniestro. Para el empleado de la pirotecnia Quilis también se ha pedido la absolución. "Fue un hecho desgraciado pero no hubo negligencia", ha resumido su letrado, Luis Felipe Alfaro.

Para Isabel Castillo, una de las abogadas de la acusación, ha quedado clara la responsabilidad tanto de la pirotecnia como de la comisión fallera en el accidente.

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Sobre la firma

Cristina Vázquez
Periodista del diario EL PAÍS en la Comunitat Valenciana. Se ha ocupado a lo largo de su carrera profesional de la cobertura de información económica, política y local y el grueso de su trayectoria está ligada a EL PAÍS. Antes trabajó en la Agencia Efe y ha colaborado con otros medios de comunicación como RNE o la televisión valenciana À Punt.

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