_
_
_
_

La huelga de la EMT amenaza con colapsar la noche de San Juan

El Ayuntamiento acusa al comité de incumplir los servicios mínimos

Dos autobuses, este viernes, en una parada en el centro de Valencia.
Dos autobuses, este viernes, en una parada en el centro de Valencia. JORDI VICENT

Los trabajadores de la EMT de Valencia llevan ya dos días de huelga parcial por la reducción de sus salarios hasta un 17%. Este sábado, coincidiendo con la noche de San Juan, la protesta durará las 24 horas. Con esta medida amenazan con colapsar las actividades programadas para esta jornada. El Ayuntamiento, por su parte, acusó al comité de empresa de incumplir los servicios mínimos: “Nos preocupa lo que está pasando”, señaló el concejal de Transporte, Alfonso Novo, “y más cuando partíamos de un acuerdo”. Aun así, bromeó con que esperaba “con ilusión” el transcurso del día y aseguró que había previsto refuerzos del servicio a partir de las tres de la tarde.

El concejal pidió, además, “racionalidad, serenidad y sensatez” tras los retrasos causados por piquetes en el arranque de las huelgas e indicó que el segundo día habían alcanzado las dos horas. “No estamos hablando de mileuristas, sino de gente que tiene que hacer un esfuerzo para no irse a la calle”, remarcó. “Está en juego la viabilidad de la empresa”, añadió, “y lo que está pasando en la calle es injusto. Lo único que provoca es que el acuerdo sea más difícil”, apostilló.

Con respecto a los incidentes denunciados, Novo explicó que la suma de los destrozos —ruedas pinchadas, máquinas billeteras y limpieza de pegatinas— asciende a casi 100.000 euros desde que comenzaron las quejas de los trabajadores. “Solo generan más gasto”, pronunció, “y afectan al uso diario de los autobuses”.

El comité de empresa desmintió todas las acusaciones e indicó que el paro se había secundado al 100%, pero respetando “escrupulosamente” los horarios acordados. “Si ha habido algún destrozo, aunque no nos consta, estamos dispuestos a colaborar para que se investigue y se sancione a los responsables”, espetaron. “Y, dado que existen cámaras de seguridad, que se utilicen para reconocer los actos e identificar [a sus autores]”, insistieron.

“Estoy dispuesto a que nos metamos en un cuarto y no salgamos hasta que haya una solución”, concluyó el responsable de Transporte, que aclaró: “Pero sus reivindicaciones son falsedades: Rita sí que paga”.

Vicente Moreno, presidente del comité, añadió que aún no ha habido un ofrecimiento para que alguien medie en el conflicto y reiteró que los trabajadores no solo se quejan de la reducción de sus nóminas, sino de que tienen pendientes de cobro 2.400 euros: “Si eso no es dinero, que baje Dios y lo vea”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_