El Sergas ahorrará más de 100 millones con los nuevos ajustes

La implantación de los ajustes promovidos por el Gobierno central permitirá al Sergas ahorrar “más de 100 millones de euros”, según señaló ayer la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, durante su comparecencia parlamentaria para presentar el proyecto ejecutivo del nuevo hospital de Vigo, cuyo modelo de financiación Mosquera defendió como legítimo y la oposición tachó de “fracasado” en base a las experiencias de Reino Unido, Comunidad Valenciana o Madrid. La fórmula de contratación, denominada PFI o de colaboración público-privada, marcó el eje del debate más allá de los detalles arquitectónicos del nuevo hospital, en cuyas mejoras de funcionalidad y eficiencia insistió la conselleira.

 El nuevo hospital de Vigo “es una pieza en el puzzle de la privatización” emprendida por la Xunta y el PP y el canon que se pagará durante 20 años encarecerá la obra en más de 1.000 millones, según la nacionalista Carme Adán. También el portavoz socialista, Modesto Pose, subrayó la “fiebre privatizadora” del PP, y requirió aclaraciones sobre cuál es el “núcleo duro” que preserva el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en sus propósitos de privatización sanitaria. Pose invocó el principio del propio Feijóo de que “no se puede gastar lo que no se tiene” para aplicarlo al hospital, ya que su coste quedará como deuda, “aunque la llamen solidaridad intergeneracional”.

Mosquera tachó de “falacia” el sobrecoste de 1.000 millones en la obra, ya que incluye la explotación de los servicios externalizados, a razón de 33 millones anuales por 12 servicios, de los que nueve ya están externalizados. En octubre, la anterior titular de Sanidade, Pilar Farjas, cifró ese coste en 27 millones, recordó luego Adán, que pidió aclarar “cuál es el coste real”, aunque, a su juicio, la cuestión capital es que las concesionarias cobran dos veces: de la Xunta, por construir el parking, por ejemplo, y la tarifa que cobrarán luego a los usuarios.

La conselleira cerró el debate atribuyéndose una gestión más eficiente del Sergas, que prevé ahorrar 25 millones en fármacos este año, otros 50 millones en 2013 y más de 100 millones con la implantación de los últimos ajustes promovidos por el Gobierno Rajoy.