Del vuelo del águila culebrera al del milano real

Esperanza Aguirre ha presentado esta mañana la primera red madrileña de rutas ornitológicas, con más de un centenar de puestos de observación repartidos en nueve áreas de interés -Polvoranca, las lagunas de San Juan y del Campillo, Manzanares el Real, Torrejón de Velasco, Chapinería, Montejo de la Sierra, Peñalara y Abantos-. En ellos, se podrán avistar más de 300 especies, entre ellas el águila culebrera y el milano real (en los cordeles montañosos de La Pedriza o el valle de la Fuenfría), el cernícalo primilla, el aguilucho pálido y el mochuelo (en las dehesas y encinares del Monte de El Pardo), el halcón peregrino y la garza imperial -a lo largo de las riberas del Tajo y sus afluentes- y el mirlo y la cigüeña negra -en las áreas arboladas junto a las ciudades-.

La presidenta madrileña ha elegido una soleada mañana de primavera para visitar la laguna de Soto de las Juntas, en el Parque del Sureste de Rivas Vaciamadrid, y presentar allí el proyecto Birdwatching, con el que se pretende promover el turismo de naturaleza, el respeto al medio ambiente y dinamizar la economía de los pequeños municipios. La presidenta ha acudido a la laguna montada en bicicleta, al igual que Fausto Fernández, teniente de alcalde de Rivas -donde gobierna IU-, y la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño. Los tres se han dado un paseo en bici por el paraje, donde se unen el Manzanares y Jarama.

Después, Aguirre ha cambiado la bici por una lancha neumática, desde donde ha soltado cuatro ejemplares de anade real(tres machos y una hembra) en mitad de la laguna, incluida en la Red de Rutas Ornitológicas de la Comunidad y a menos de media hora andando del Metro de Rivas. Este lugar, ha explicado la presidenta, se levanta en una antigua gravera y alberga un centenar de especies de aves de las alrededor de 300 que existen en la región, muchas de ellas protegidas al tratarse de ejemplares muy singulares y muy difíciles de avistar en otros lugares del mundo como el águila imperial, la avutarda, el abejaruco o el buitre negro.

En concreto, en Madrid viven 36 especies de aves de interés especial y 25 protegidas, según su grado de amenaza. Además, en la región, donde se tramita la creación de un parque nacional en Guadarrama, se concentran 23 zonas húmedas protegidas, 14 embalses, 10 espacios naturales protegidos, siete zonas de especial protección para las aves, siete lugares de interés comunitario y dos reservas de la biosfera.

Ha subrayado que, a pesar de sus escasas dimensiones y de que se trata de una región densamente poblada, la Comunidad es "muy rica en naturaleza y biodiversidad" al ser lugar de paso de las aves migratorias que se desplazan desde el norte de Europa a África y viceversa. Por este motivo, ha añadido Aguirre, cada año visitan la Comunidad muchos aficionados extranjeros, especialmente los británicos -suman el 86% del turismo ornitológico, seguidos de los estadounidenses, el 7%-.

La presidenta ha admitido que la práctica del avistamiento de aves está poco extendida en Madrid, pero ha dicho que el Gobierno regional se propone fomentar esta afición entre "las familias o grupos de amigos" convirtiéndolos en "exploradores" de los parajes naturales.

Los itinerarios ornitológicos diseñados recorren parajes tan dispares como La Pedriza o el Valle de la Fuenfría y el Monte del Pardo o el río Tajo, a través de territorios municipales, fincas particulares, espacios naturales protegidos, parques urbanos y vías pecuarias. La Comunidad ha anunciado que pondrá en marcha una web y una aplicación para teléfonos móviles para informar de la red y también tiene previsto implantar rutas a caballo y paseos en bicicleta.