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Las centrales amenazan con huelga en el sector público

La CIG convoca un paro general a finales de marzo

Los sindicatos no darán el brazo a torcer ante las propuestas de recorte que plantea la Xunta para los trabajadores públicos y amenazan con huelga en el sector. Media hora después de su anuncio, la central CIG decidía convocar un paro general para finales de marzo, al que pedirán que se unan otros sindicatos. Ambas protestas tienen de fondo los recortes: la primera, los de la Xunta sobre la función pública y, la segunda, sobre los “profundos” recortes que prometen la reforma laboral y los próximos presupuestos del Estado. El secretario general de CIG, Suso Seixo, lamentó que “todos los sacrificios están recayendo en la clase trabajadora” y no sobre la “gran banca y oligarquías financieras”.

Las cuatro centrales sindicales —UGT, CC OO, CIG y CSIF— piden al Gobierno de Feijóo que retire el anteproyecto con el que pretenden dejar de pagar las bajas los primeros 21 días y ofrecer una disminución voluntaria de jornada laboral y suelo a los funcionarios que serán obligatoria para los interinos. Pese a que la conselleira de Facenda insistió en que los puntos son negociables, los representantes no quieren pactar recortes y amenazan con una huelga en el sector si la Xunta no recula. “Desde la responsabilidad, no descartamos ninguna medida, pero la huelga no la van a descartar los sindicatos, sino Feijóo. Si sigue con estas políticas, no lo descartamos. Es su responsabilidad evitarla”, afirmó el responsable de CC OO, Ramiro Otero. Por ahora, han convocado concentraciones cada jueves del mes y piden también el apoyo de la sociedad porque “este proyecto va a ahondar en desaparición empleos y precarización que va a afectar a los servicios públicos”, indicó la responsable de la CIG, María Carme Santamariña.

Los portavoces de CC OO y CIG coincidieron con Juan Carlos Fernández, de UGT, y Juan Carlos Rivas, de CSIF, en que la Xunta pretende “crucificar” a los funcionarios y “culparlos” de la crisis en lugar de buscar otras vías de financiación como vigilar el fraude o la subida fiscal, apuntaron. “Nos estamos situando en niveles salariales de 2007, hemos hecho esfuerzos y sacrificios, ofreciendo negociaciones con mínimos muy importantes. Lucharemos, y no lo hacemos desde ningún privilegio, somos trabajadores como los que más”, afirmó Rivas. Facenda lamentó que los sindicatos no hayan presentado propuestas “para mejorar el texto”.

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