Los consejeros de Juventud plantan cara a Petro en una reunión tensa
El presidente recibió este miércoles reclamos de todo tipo por parte de algunos de los jóvenes líderes, elegidos popularmente en 2021
El presidente Gustavo Petro vivió este miércoles un momento incómodo durante un encuentro con los consejeros de Juventud, un cargo elegido por voto popular y que sirve como mecanismo de interlocución ante la Administración en los temas juveniles. El primer mandatario se sentó por la tarde en el auditorio Delia Zapata Olivella, en el centro de Bogotá, acompañado por la vicepresidenta Francia Márquez y Gareth Sella, el primer viceministro de la Juventud del Ministerio de Igualdad. Era el primer encuentro de estos consejeros con el presidente, que ya los había dejado plantados varias veces. El diálogo no salió como se había previsto. Algunos consejeros terminaron reclamando a Petro, a los gritos, que los escuche, que “ponga a trabajar a los funcionarios”, que no mantenga “un discurso populista”. Si los jóvenes fueron fundamentales en 2022 para que el izquierdista llegara a la Presidencia, ahora algunos de sus voceros le plantaron cara.
El acto, que transmitió en vivo la Presidencia, empezó de forma más tranquila. Márquez, ministra de Igualdad, dijo unas palabras sobre el papel de la juventud y el trabajo del Ministerio a su cargo, que estrenó su Gobierno y cuya creación fue anulada la semana pasada por la Corte Constitucional. A continuación, varios consejeros pronunciaron discursos cortos sobre sus inquietudes con la Administración de Petro.
Julián Carranza Capera, consejero de Juventud por el Huila, pidió “un compromiso firme y sin retrocesos para que la agenda de las juventudes sea la agenda de este Gobierno”. También solicitó que el presidente diera más dinero al Fondo Generación Valor, una ayuda económica destinada al acceso para programas formales de educación superior en el nivel de pregrado para jóvenes elegidos como consejeros de juventud y en situaciones de vulnerabilidad. Cómo él, numerosos consejeros expresaron su descontento con la lenta puesta en marcha de los programas del viceministerio de Juventudes.
Minutos después, vestido una vez más con la ya insigne gorra presidencial, Petro se acercó al podio. Durante unos veinte minutos se refirió a la importancia del Ministerio. Insistió en que todos los colombianos tienen que “ser iguales ante las posibilidades, ante los derechos, ante la vida”. Ahondó en la necesidad de que la juventud sea “vanguardia”. Y se despidió. La presentadora del foro entonces cogió el micrófono y anunció: “Gracias, señor presidente. De esta manera damos por finalizado este acto”. Acto seguido, se cortó la transmisión de la Presidencia. Pero los asistentes no habían terminado.
Un video de más de una hora y veinte minutos, publicado en X por el exconsejero de Juventud por el Atlántico Juan Barraza, muestra lo que pasó a continuación. El auditorio se llenó de tensión y los asistentes empezaron a vocear su descontento: “Presidente, ¡no hay respuestas!”. “¡No me respondió!”. Petro, que ya se había parado, regresó a su asiento. La presentadora le explicó la frustración de los consejeros. “Nosotros nos hemos movilizado desde las siete regiones del país, en representación de las juventudes de Colombia, a pedirle respuestas frente a las inquietudes que trajimos. Cuando nos paramos aquí a intervenir, le dijimos: señor presidente tenemos un problema, pero también le presentamos una solución. Y nos gustaría que usted nos diera una respuesta”, dijo.
Sin que contestara el presidente, los asistentes de una sala llena comenzaron a pararse para expresar sus reclamos. Una chica, al fondo del auditorio con capacidad de 511 personas, gritó que no estaba satisfecha con la intervención del Gobierno frente al reclutamiento forzado de niños en el Cauca. La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN) ha denunciado hace pocos días que más de 800 niños de esa región han sido reclutados en los últimos cuatro años por las disidencias de las extintas FARC. Varios más expresaron que no estaban conformes con las respuestas de la Administración a las peticiones de las asociaciones de juventud. Muchos subieron el tono. Finalmente, el consejero de Juventud de Santander, William Molina, cogió el micrófono y le mandó un mensaje fuerte a Petro: “Nos hemos mantenido en un discurso populista y no podemos seguir en lo mismo”.
La escena se tornó agresiva. Con tantos reclamos distintos, parecía la marcha multitudinaria que la oposición convocó el pasado 21 de abril. Ese día, unos 400.000 manifestantes con quejas de todo tipo salieron a marchar en contra del mandato de Petro. Ante ello, la vicepresidente intervino ante el auditorio. “Aquí no se trata el que más grite, así no podemos construir. Si vino el presidente, la vicepresidenta y los ministros es porque estamos manifestando nuestra disposición de construir con ustedes”, dijo, tratando de calmar la situación. “Yo entiendo la necesidad, pero aquí el presidente está planteando una solución mucho más estructural”, agregó.
Petro finalmente habló de nuevo y los asistentes recuperaron la calma, pero no se llegó a una conclusión. El presidente se negó a subir los pagos del Fondo Generación Valor. Según él, los consejeros piden que esa ayuda entregue a los jóvenes estudiantes tres salarios mínimos ―3.900.000 de pesos (unos 1.000 dólares)―. Tras media hora más de diálogo, el último en hablar fue Sella, el viceministro y quien perdió un ojo a manos de la Policía durante el estallido social del 2021. Habló de la importancia de que el Gobierno a que pertenece sea, en sus palabras, uno que sí escucha a los jóvenes. “No nos dispara. No nos manda a la cárcel. No nos chuzan los teléfonos”, dijo ante los aplausos de la sala.
Para culminar, explicó que lograr el cambio “no es fácil”, pero insistió en que el Gobierno lo quiere hacer de mano de los jóvenes. “La política pública de juventud toma su tiempo, por supuesto, pero aquí estamos construyendo algo que tiene que quedar sólido en la juventud colombiana de aquí para siempre. Y para que esto quede para siempre, tenemos que llegar a entendernos”, dijo. Los asistentes respondieron vociferando: “¡Asamblea!”. Poco después, acabó la reunión.
Este jueves, en entrevista con W Radio, Sella aseguró que la puesta en marcha de los programas del viceministerio de Juventudes “no se va a tardar años”. “Estamos en la creación de todo el Ministerio que tiene que surtir unos procesos jurídicos para la creación y cumplir con todo. Vamos con el cronograma. Jóvenes en Paz ya salió, ya lleva más de 2.500 jóvenes, serán más de 50.000 jóvenes. Estamos listos para sacar el programa de barrismo social, en el cual ya nos comprometimos con más de 8.000 millones de pesos (2 millones de dólares)”, dijo.
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