Quién es quién en el escándalo político en Colombia

Gustavo Petro ganó la presidencia contra Rodolfo Hernández en 2022. Entre los factores que influyeron para su triunfo se destaca la ayuda del entonces senador Armando Benedetti para movilizar a sus votantes. Petro y Benedetti parecían una dupla indiscutible, hasta que los escándalos judiciales del segundo hicieron que el primero se alejara y lo mantuviera a raya.

Un año después de esa buena racha todo parece ir cuesta abajo, sobre todo el apoyo de sus más allegados después de que la revista Semana filtrara unos audios en los que Benedetti muestra su hartazgo y amenaza a quien antes era su persona más cercana en el Gobierno además de Petro, Laura Sarabia.

Armando Benedetti

Benedetti fue clave en la campaña de la izquierda y las movilizaciones que llevaron al triunfo de Gustavo Petro. El reciente exembajador de Venezuela fue destituido de su cargo luego de una trama de conspiraciones en las que Benedetti y Laura Sarabia, su antigua amiga y empleada, resultaron enredados.

Cuando Petro le otorgó el cargo como embajador de Venezuela, el político consideró que su nueva posición era un destierro, puesto que fue colocado en el cargo después de que lo persiguieran varias causas judiciales.

Con más de 20 años de trayectoria política, antes había sido presidente del Congreso y militante del uribismo y del santismo. Se une a Petro para guiarlo en la búsqueda de votos. Su relevancia para que Petro ganara la presidencia lo hizo considerar que tendría un cargo relevante en el Gobierno. Quería regresar a Bogotá como ministro, y Petro le ofreció una posición inexistente en este Gobierno pero que ha existido en administraciones anteriores: superministro. Pero su regreso se frena sin certeza de la causa.

Es ahí cuando si relación con Laura Sarabia comienza a ser ríspida; se siente amenazado por quien era su subordinada. Cree que ha intervenido su teléfono y se filtra información sobre Sarabia y la cuidadora de sus hijos en Revista Semana, que deja una sombra de abuso de poder sobre la entonces jefe de gabinete de Petro. El periodista Daniel Coronell asegura que fue Benedetti quien llevó esa información al medio, y otras fuentes aseguran que el político chantajeó a Sarabia.

El escándalo se dispara cuando, pocos días después y en un hilo de Twitter, Benedetti asegura que Sarabia le había pedido evitar la publicación de Semana porque temía que se supiera que en su casa había dinero en efectivo; además asegura que Sarabia había pedido intervenir ilegalmente el teléfono de la niñera.

Más tarde, en unos audios que dio a conocer Semana, Benedetti amenaza a Laura Sarabia, “Nos hundimos todos. Nos acabamos todos. Nos vamos presos, acabamos toda la hijueputa verga”, refiriéndose a la campaña de Petro.

Lo último que se supo del político es que viajó del Aeropuerto Internacional El Dorado para cumplir un compromiso familiar, del que se supondría, debería regresar el próximo martes, y que estaría en la final de ha Champions este sábado.

Laura Sarabia

La jefa de gabinete de Gustavo Petro, de 29 años, fue presentada a Petro por Benedetti, con quien había trabajado. Cuando tenía 21 años y buscaba trabajo tras terminar la universidad, una amiga le recomendó buscar trabajo en el partido de La U. Entra como becaria y comienza a trabajar con Benedetti, uno de los políticos más relevantes del partido, y quien había sido presidente del Congreso y de su partido.

Al momento de la campaña de Petro, cuando Benedetti empieza a dirigirla, Sarabia asume un papel administrativo en el que organiza los viajes y la agenda del próximo presidente. Tras la victoria de Petro y su posesión como presidente, Benedetti ocupa el cargo de embajador en Venezuela y aunque Sarabia cree que lo seguirá, Petro le ofrece ser su jefa de gabinete. Lo asume y se convierte en la persona más cercana al presidente.

El primer escándalo que la involucró fue el de las declaraciones de la cuidadora de su hijo, Marelbys Meza, quien relata, fue sometida al polígrafo en la Presidencia tras recibir presiones. Eso ocurrió después de que desapareciera de la casa de la entonces jefa de gabinete un maletín con miles de dólares. Sarabia denuncia ante la Fiscalía el hurto de 7.000 dólares que, de acuerdo con sus declaraciones, eran viáticos.

Igual que Benedetti, Sarabia fue destituida de su cargo. “Mientras se investiga, mi funcionaria querida y estimada y el embajador de Venezuela se retiran del gobierno”, anunció el presidente en un discurso público durante una ceremonia de ascenso de oficiales del Ejército.

Marelbys Meza

Niñera del hijo de Laura Sarabia, fue quien contó a la revista Semana cómo fue sometida después de que se le acusara de un robo que, de acuerdo a su declaración, no cometió. La Fiscalía le puso protección después de que Meza asegurara que sufría acoso.

La niñera había trabajado con Benedetti y su familia al momento en el que la campaña de Gustavo Petro arrancaba. En ese tiempo, Meza también fue sometida a una prueba con el polígrafo y fue encontrada culpable de hurto y despedida. En las declaraciones que hace a la revista Semana, asegura que mientras le hacían la prueba del polígrafo, en el Palacio de Nariño, se sintió secuestrada y maltratada.

El diario digital Cambio aseguró que su teléfono había sido interceptado ilegalmente. El fiscal Francisco Barbosa asegura que para lograrlo, habían hecho creer que Marelbys Meza era miembro del Clan del Golfo.

Antes de que la cuidadora diera estas declaraciones a Semana, Benedetti la trasladó a Venezuela en un vuelo privado que según el exembajador tuvo como fin su contratación para el cuidado de sus hijos. De acuerdo con el político, la tuvo que volver a contratar para que Meza no se acercara a los periodistas.

Álvaro Leyva

El Ministro de Relaciones Exteriores de Colombia ve con malos ojos el nombramiento de Benedetti como embajador y la Cancillería vigila los viajes que el embajador hace a Colombia. Tras la salida de Benedetti y la revelación de audios de éste en el que dice que ayudó a una financiación ilegal de la campaña presidencial de Petro, el Canciller dijo que no se podía creer a “un drogadicto”.

Francisco Barbosa

El fiscal, que ocupa ese lugar desde la administración anterior y actúa como opositor a Petro, le da suma relevancia al escándalo. Convoca una rueda de prensa y asegura, intervenir el teléfono de Marelbys Meza es una de las peores muestras de violación de derechos humanos en Colombia. Afirma que llegará hasta el final y hará declarar a Sarabia y Benedetti para esclarecer el caso. Abre indagatorias al respecto y asegura que un policía fue quien dijo que Marelbys Meza pertenecía al Clan del Golfo para que un fiscal aprobara incluir la intervención de su teléfono en una operación legal más amplia.

Gustavo Petro

El presidente de Colombia, quien mandó a Benedetti como embajador de Venezuela y recargó su poder en Laura Sarabia, intenta contener el daño tras las declaraciones del entonces embajador y Marelbys Meza. En los audios que se dieron a conocer, Benedetti asegura que los hechos que conoce de la financiación de la candidatura de Petro podría mandar a todos a prisión.

Reúne a los involucrados en su despacho y más tarde, retira a Sarabia y Benedetti de su cargo. Petro declara, en un trino, que “en ninguna entrevista o en audios se ha mostrado que he cometido un delito. Se trata de un simple intento de golpe blando para detener la lucha contra la impunidad”.

Federico Gutiérrez y Miguel Uribe

Luego de la filtración de los audios, el contendiente a la presidencia por la coalición Equipo por Colombia, Fico Gutiérrez y el senador opositor Miguel Uribe denuncian al presidente Gustavo Petro ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara para que explique la financiación de su campaña de 2022.

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