Sánchez se someterá en dos años a una cuestión de confianza si gobierna
El líder socialista incluye este compromiso, que no tenía el 20-D, en las elecciones del 26-J
Pedro Sánchez se someterá en dos a una cuestión de confianza si es presidente del Gobierno. El candidato socialista afronta las elecciones del 26 de junio con este compromiso, una novedad respecto a las elecciones del 20-D, aunque el partido ya había planteado esta propuesta a Compromís, en plenas negociaciones para formar Ejecutivo, "para rendir cuentas a los ciudadanos y demostrar que el PSOE cumple con los objetivos marcados". "En estos cinco meses he demostrado que soy un político que hace lo que dice. Yo voy en serio y cumplo con mi palabra. No vamos a hacer promesas imposibles, sino realistas", ha expresado este lunes, tras una reunión con el equipo de expertos socialistas. Otras promesas con las que Sánchez encara la repetición de las generales son la puesta en marcha de una reforma fiscal en seis meses y un plan anticorrupción en tres meses.
El pasado 26 de abril, en los estertores de las negociaciones con Podemos y Ciudadanos para alcanzar un acuerdo y formar un gabinete —el plazo acababa el 2 de mayo—, Sánchez ya se comprometió a someterse a una cuestión de confianza en junio de 2018. Para eso, los socialistas pedían que se les garantizase el apoyo a "dos Presupuestos Generales del Estado para dar estabilidad suficiente al acuerdo". "Si Pedro Sánchez propone una cuestión de confianza es para obtener esa confianza. Que quede claro que vamos a cumplir con los compromisos de este acuerdo y del acuerdo firmado con Ciudadanos", explicó, entonces, el portavoz parlamentario, Antonio Hernando. Podemos y sus aliados territoriales argumentaron, para rechazar esa propuesta, que no podían comprometerse por adelantado a apoyar los presupuestos del Estado.
Tras enfatizar que el PSOE es el partido "que ha hecho más para que no hubiera unas segundas elecciones", el aspirante a La Moncloa ha descartado la repetición de otras generales. "Si el PSOE es la primera fuerza, habrá cambio. Ya no habrá excusas para quienes bloquearon el cambio. Vamos a hacer lo indecible para que no haya unas terceras elecciones". Sánchez afronta el 26-J como "unas nuevas elecciones y no una segunda vuelta", en contra del mensaje que intenta colocar Podemos. "Las afrontamos como un plebiscito para romper la gran coalición por el bloqueo", ha insistido el líder del PSOE.
Como viene haciendo, ha reivindicado "la socialdemocracia" como el mejor remedio "a la encrucijada en que se encuentra España". "El PP defiende recortes y la intransigencia defiende que Rajoy siga gobernando el país. La solución es la socialdemocracia... La gran lección del 20 de diciembre es que quien quiera cambiar que no busque intermediarios. El PSOE es la alternativa que puede acabar con el PP", ha recalcado ante una campaña que PP y Podemos pretenden polarizar en perjuicio de los socialistas.
Sánchez apoya la protesta contra la suspensión de leyes catalanas
Pedro Sánchez ha defendido la presencia de Miquel Iceta, primer secretario del PSC, en la manifestación de este domingo en Barcelona contra los recursos del PP al Tribunal Constitucional por los recortes de derechos sociales. El líder del PSOE apoya la protesta contra la suspensión de leyes sociales catalanas. Aunque el acto fue promovido por CC OO, UGT y entidades sociales, la manifestación quedó marcada por los gritos independentistas de la Asamblea Nacional Catalana.
"El PSOE en Cataluña se manifestó en contra de los recortes del Gobierno", ha afirmado Sánchez. Su mensaje coincide con otros miembros de la dirección del PSOE, que puntualizan que la manifestación "no era independentista, sino contra los recortes", y subrayan, en todo caso, la contradicción de que los partidos independentistas que gobiernan la Generalitat acudieran a la protesta, "pese a aprobar recortes".
"Los recortes no solo se hacen vía presupuestaria, hay otra forma de recortar: recurrir ante el Constitucional leyes sociales que garantizan la lucha contra la desigualdad", ha incidido Sánchez. "El PSOE apoya al PSC y, para garantizar a aquellas asociaciones, colectivos y activistas que han impulsado avances sociales con Gobiernos progresistas. La garantía que tienen que tener todos esos colectivos sociales es que con un Gobierno socialista no se recortará en ese campo", ha observado el dirigente socialista.
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