El PSOE creará una tasa específica para sufragar las pensiones

El programa electoral del PSOE está ya hecho y aprobado, aunque se incorporarán algunas novedades, ajustes y propuestas complementarias a las ya existentes. La política de impuestos que se propondrá tendrá cambios porque en estos meses la situación “se ha deteriorado”, señala el responsable económico y ministro en la sombra de Economía y Hacienda, Jordi Sevilla.

La novedad que avanza a EL PAÍS está en la creación de una tasa específica para sufragar las pensiones; esa tasa saldrá de incrementar en su cuantía algunos impuestos ya existentes para dedicarlo a pensiones. El modelo es el francés, que establece recargos sobre algunos impuestos para destinarlos a las pensiones. En el programa electoral del PSOE figura que la redefinición del sistema de pensiones se tratará en el Pacto de Toledo con la participación de empresarios, sindicatos y partidos políticos, pero la inclusión de esta tasa será la propuesta de un Gobierno socialista.

“El punto de referencia no será cómo se reforma el modelo sino cómo mejoramos los ingresos para las pensiones, porque el sistema está en riesgo”, señala Jordi Sevilla, que acusa al Gobierno de Mariano Rajoy de haber dejado en muy malas condiciones las arcas de la Seguridad Social. El hilo conductor que traza el equipo económico del PSOE, que dirige Sevilla —con Manuel de la Rocha, desde la ejecutiva socialista, y el exdiputado Pedro Saura— parte de los bajos salarios españoles y, por tanto, de la baja aportación a la Seguridad Social.

Los ajustes que hará el PSOE en su programa se aquilatarán tras escuchar el dictamen, ayer, de la Comisión Europea, que ha dado un año a España para que cumpla el objetivo de déficit y que debe recortar unos 8.000 millones de gasto. “Con esta situación es un insulto a los españoles que Rajoy diga que va a bajar los impuestos, todo por razones electorales”, recrimina Sevilla.

Déficit y paro

Y anuncia: “Nosotros pediremos a Bruselas dos años de aplazamiento para bajar a menos del 3%, con el compromiso firme de cumplir con nuestras obligaciones”. La necesidad de “acompasar” el ritmo de reducción del déficit a la situación de un país con el 20% de paro es lo que les llevará a pedir que se permita a España cumplir en 2018 y no antes de esa fecha.

Un Gobierno socialista pretende dar un cambio sustancial a la política fiscal. No se toca el IRPF , pero se obtendrán nuevos recursos con la subida del impuesto de sociedades, con la que piensan obtener 1.500 millones al año; otros 1.000 con el impuesto sobre las grandes fortunas; 2.500 por el afloramiento del fraude fiscal y 1.000 con impuestos medioambientales. Respecto a los recortes, los socialistas dicen que tratarán de que no sean en servicios esenciales, como ha ocurrido hasta ahora, sino que el ahorro vendrá de una “mayor eficiencia de las Administraciones públicas”.

El debate sobre si se deroga o no la reforma laboral es “artificial”, según Sevilla, porque si llegan al Gobierno “desmontarán” sus aspectos más sustanciales para devolver la negociación colectiva a la vida laboral que ahora depende solo de los empresarios. “Sin rigideces, con flexibilidad pero reparando el deterioro de los derechos laborales”, precisa. Detrás de cada medida hay “ideología”, señala Sevilla, pero el PSOE buscará el pacto social y político.

Un Gobierno socialista no actuará en virtud de “bloques ideológicos”, pero buscará “el equilibrio social” a través del mercado laboral —salario directo— y con las prestaciones en sanidad, educación, servicios sociales, entre otras. “Que nadie se engañe, a nuestro programa lo recorre el objetivo de combatir la desigualdad, que ha aumentado en España de manera extraordinaria”, señala Sevilla. “Queremos recuperar los equilibrios sociales, pero con la negociación”, apostilla para infundir tranquilidad.