Estados Unidos critica la “retórica divisiva” de Netanyahu
Los reproches de Washington anticipan la futura tensión en las relaciones con Israel, tras la victoria electoral del primer ministro
En un anticipo de la futura tensión en las relaciones entre Estados Unidos e Israel, la reacción de la Casa Blanca a la victoria electoral de Benjamin Netanyahu estuvo más dominada por los reproches que por las felicitaciones al primer ministro israelí. El portavoz del presidente Barack Obama lamentó este miércoles la “retórica divisiva” acerca de la población árabe-israelí usada por Netanyahu durante la campaña electoral.
“Estados Unidos y esta Administración está profundamente preocupada por la retórica que busca marginar a ciudadanos árabe-israelíes”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, en declaraciones a los periodistas a bordo del avión presidencial. “Socava los valores e ideales democráticos (...) que son una parte importante de lo que une a EE UU e Israel”.
Aunque no hizo una referencia concreta, Earnest posiblemente se refería al vídeo difundido en las redes sociales el martes, el día de las elecciones, en que, buscando atraer el voto nacionalista, el conservador Netanyahu afirmaba: "El gobierno de derecha está en peligro. Los votantes árabes están yendo en grandes cantidades a los puestos de votación". Los ciudadanos árabes suponen el 20% de la población israelí.
Washington “reevaluará” su “posición” y próximos pasos después de que Netanyahu afirmara que si era reelegido no habría un Estado palestino
En otro frente de tensión, Earnest dijo que Washington “reevaluará” su “posición” y próximos pasos después de que, en el último día de campaña, Netanyahu afirmara que si era reelegido no habría un Estado palestino.
El portavoz recordó que durante más de 20 años Washington ha apoyado una solución de dos estados en el conflicto entre Israel y Palestina y que la considera “la mejor manera de suavizar las tensiones”. En abril, se suspendió el proceso de paz entre el Gobierno israelí y la Autoridad Nacional Palestina impulsado intensamente por EE UU y en particular su secretario de Estado, John Kerry.
Precisamente, Kerry habló este miércoles por teléfono con Netanyahu. Y Obama tiene previsto hacerlo en los próximos días. Washington y Jerusalén mantienen una estrecha relación en materia de seguridad, pero el entendimiento se ha debilitado en los últimos meses.
La relación entre Obama y Netanyahu es tirante desde hace tiempo y se agravó a principios de marzo cuando el primer ministro israelí criticó en el Congreso de EE UU -invitado por la oposición republicana y sin avisar a la Casa Blanca- las negociaciones de Washington y otras cinco potencias con Irán acerca de su programa nuclear.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.