EE UU ‘torpedea’ la propaganda yihadista
Washington lanza un vídeo a través de su campaña en el que muestra las atrocidades del EI
El campo de batalla es Twitter. Ahí, la actividad del Departamento de Estado estadounidense es frenética. Y tiene pocas cortapisas. En uno de sus 17 tuits publicados el viernes con el hashtag (hilo de comunicación de esta red) #thinkagainturnaway, la sección de comunicación y contraterrorismo informa de que ya hay combatientes sirios que dicen no al Estado Islámico (EI) porque “asesinan a musulmanes”. La foto que acompaña muestra a un yihadista descargando su rifle contra hombres no uniformados.
Think again turn away (Piénsalo de nuevo y date la vuelta) es el nombre de la campaña lanzada hace un año por esta sección de contraterrorismo, dirigida por el exdiplomático de origen cubano Alberto Fernández, y que este fin de semana ha sacudido las redes con un vídeo de un minuto en el que con ironía da la bienvenida a los que quieran adentrarse en el califato del EI. Con imágenes sacadas de cintas editadas y publicadas por el aparato de propaganda de los yihadistas, el Departamento de Estado alerta: “Corre, no camines hacia la tierra del EI”.
Tal es la brutalidad del montaje hecho por Washington (voladura de mezquitas, crucifixiones, cabezas cortadas) que YouTube, donde estaba alojado, decidió bloquearlo, como hace con muchas producciones yihadistas.
La guerra en Internet entre yihadistas, servicios de inteligencia y plataformas de contenidos es la guerra del ratón y el gato. Si el perfil de Twitter vinculado al EI @wilaiat_Halab2 es “suspendido”, sólo hace falta cambiar el último número y volver al frente. Según fuentes policiales españolas, esta cuenta, con raíz en Alepo (Siria), está vinculada a la división del EI en Nínive, provincia iraquí con capital en Mosul, bastión de su califato. El actual relevo de este perfil es @wilaiat_Halab5.
Junto a esta cuenta, Interior identificó recientemente a otras 16 relacionadas con el EI. Todas han sido canceladas. El contenido de carácter violento y las normas de funcionamiento de las plataformas sociales permiten retirar de la Red vídeos, perfiles y cuentas. Gobiernos y hackers también fulminan webs de radicales a través de ataques de denial of service (denegación de servicio), centrados generalmente en saturar un servidor.
Los internautas son, no obstante, el puntal de lanza de la contrapropaganda. Cuando los yihadistas inundaron Twitter con #AmessageFromISISToUS (Mensaje del EI para EE UU), hashtag con el que difundían sus conquistas o atrocidades, como las decapitaciones grabadas de los reporteros estadounidenses James Foley y Steven Sotloff, los usuarios de esta red, sobre todo tuiteros norteamericanos, activaron el hilo #AmessageFromUStoISIS, en el que ridiculizan al EI. “No veo al EI en Twitter”, dice el perfil @lheal, “estarán escondidos detrás de sus plácidas cabras”.
La comedia, pese a ser dramático, también lucha contra el aparato de comunicación yihadista. El think tank estadounidense MEMRI difundió esta semana un vídeo titulado Una parodia palestina sobre el EI. La cinta caricaturiza a tres barbudos del EI en lo que parece un checkpoint. “¿Cuántas veces aparece la letra ‘a’ en la recopilación de hadiths [dichos de Mahoma] de Al Bukhari?”, pregunta uno de los milicianos a un apresado. “Mejor mátame”, dice con naturalidad el individuo.
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