_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Alivio a los desahucios

La prórroga de la moratoria es un buen remedio, aunque coyuntural; la vivienda requiere normas hipotecarias más claras que defiendan mejor al cliente

Luis de Guindos, ministro de Economía
Luis de Guindos, ministro de EconomíaChema Moya (EFE)

Desde una perspectiva política, el acuerdo para ampliar hasta 2020 la moratoria antidesahucios de la vivienda habitual es un buen ejemplo de lo que puede conseguir la presión inteligente de la oposición para mejorar la situación de los colectivos más afectados por la crisis. El Gobierno ha prorrogado la moratoria y también ha ampliado el grupo de personas beneficiadas por ella a las familias que tengan hijos menores de 18 años. Se suman así a las que tengan menores de edad, estén en situación de desempleo, soporten algún tipo de discapacidad o dependencia, tengan a alguno de sus componentes afectado por una enfermedad grave o hayan sufrido violencia de género.

Editoriales anteriores

La sociedad percibió la proliferación de los desahucios de la vivienda habitual como una penalización desmesurada a los grupos de población más castigados por la crisis; e, intuitivamente, como una contradicción flagrante del derecho reconocido por la Constitución a una vivienda digna. El decreto de moratoria, muy mejorable en algunos aspectos, ha contribuido a rebajar el malestar social originado por la crisis financiera y la recesión.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Pero, igual que las medidas para combatir la pobreza energética, estamos ante disposiciones de carácter excepcional, pensadas para frenar (con cierto retraso) el impacto más brutal de la crisis. La vivienda requiere normas hipotecarias estructurales que articulen mejor y de forma más clara la relación de los tomadores de préstamos con los bancos y con la Administración. No sería tolerable la aparición de un problema similar al de las cláusulas suelo;pero está a punto de aparecer en el horizonte inmediato el caso de los gastos de constitución de hipotecas, que hasta ahora pagan los solicitantes, pero que probablemente tengan que pagar los prestamistas. Se trata de aproximar la ley española a la europea para evitar sonrojos como el que sufrió el Gobierno a manos de la justicia europea a cuenta de las cláusulas suelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_