El más común de los sentidos
El más común de los sentidos parece haberse vuelto no tan común. Las numerosas crisis actuales, corrupción, extremismos, migraciones masivas, pérdida de valores... son hechos que desequilibran los sistemas, pero ante los que no deberíamos asustarnos. La constructividad y la cabeza despejada son las armas clave que necesitamos para lograr domar estos grandes problemas, es necesario aplicar soluciones eficaces y a la vez humanas y, sobre todo, bien acompañadas de sentido común. El miedo, ya lo sabemos, paraliza. En este sentido no necesitamos partidos excéntricos, ni extremistas, ni populistas, ni secesionistas que se sirven de nuestros miedos para gobernar. Necesitamos dirigentes sensatos y preparados que posean el verdadero deseo de hacer prosperar a una nación y a todos sus ciudadanos, y esto se consigue con mucho trabajo con apoyo ciudadano, con empatía y, sobre todo, con mucho sentido común. Necesitamos de vuelta al más común de nuestros sentidos.— Cristina Sande Cecchi. Zaragoza.
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