Serena Williams asegura que no se quedará callada ante la violencia policial

Serena Williams no se quedará callada. No es una amenaza es su forma de alzar la voz contra la reciente ola de violencia por parte de la policía hacia la comunidad negra en Estados Unidos. Su fama y pertenecer al exclusivo club de las mejores tenistas del mundo le dan la plataforma ideal para hacer llegar su mensaje a millones de personas. Por eso ha usado su perfil de Facebook, con más de cuatro millones de seguidores, para denunciar cualquier acto que atente contra la comunidad negra.

El primer post lo lanzó la noche del martes. Williams escribió que se había animado a hablar sobre el tema después de que le pidió a su sobrino de 18 años que la llevara en coche a una reunión. Su vehículo había pasado junto a un agente de policía, y Williams "comprobó rápidamente si estaba cumpliendo el límite de velocidad" para evitar una interacción con el agente. “Fue inevitable recordar ese horrible vídeo de una mujer dentro del coche mientras la policía le dispara a su novio”, detalla. La actual número dos del mundo en la WTA hace referencia a la muerte de un chico llamado Philando Castile, que murió luego de haber sido tiroteado por un agente en Minnesota. Y continúa: “Todo esto pasó por mi mente en cuestión de segundos. Incluso me sentí culpable por no ser yo quien iba conduciendo. Jamás me perdonaría que le pasara algo a mi sobrino. Él es inocente, como todos los demás”.

La publicación tiene más de 102.000 reacciones y se ha compartido más de 17.000 veces, es además de una denuncia una reflexión acerca de lo increíble que parece que aún en esta época sigan sucediendo este tipo de cosas. “¿Por qué tengo que tener este tipo de pensamientos en pleno 2016? ¿No hemos sufrido ya suficiente. Acaso no hemos abierto ya tantas puertas, acaso no se han perdido suficientes millones de vidas? Me he dado cuenta de que no se trata de lo lejos que hemos llegado sino de todo lo que aún nos falta por caminar”, meditó.

La atleta también citó a Martin Luther King Jr., al decir que "llega un momento en el que el silencio es una traición", antes de terminar su queja con la frase "No me quedaré callada".

Williams se suma así a otras personalidades que han hablado en contra de la injusticia social como el quarterback de los 49ers de San Francisco Colin Kaepernick comenzó a arrodillarse durante el himno nacional y ahora otros de todo el país lo han seguido.