Johnny Depp huele a Dior

El actor de Piratas del Caribe, que siempre se ha cuidado de cultivar su imagen de renegado de la industria, no había caído todavía en las redes del lujo, pero termino cediendo. Ahora se estrenará como hombre-imagen de la mano de Dior. Johnny Depp es el rostro de la campaña del nuevo perfume de la marca francesa, de nombre todavía desconocido y creado por François Demachy, el nariz que se encarga de desarrollar sus fragancias.

Depp sucede a Robert Pattinson, que fue imagen de Dior Homme, y a Jude Law, la cara de Dior Homme Sport, y se une al club de los actores mayores de 50 que ejercen de reclamo para la cosmética, junto a Brad Pitt, que fue embajador de Chanel, Hugh Laurie, cara de la línea masculina de L’Oreal desde hace casi un lustro y Antonio Banderas, que tiene su propia línea de fragancias en Puig.

Lo más probable es que Depp acabe protagonizando un anuncio firmado por un realizador de prestigio, de manera que la maniobra publicitaria quede envuelta en una pátina arty. Esos fichajes se han convertido en casi obligatorios en el lujo de gama alta, que en los últimos años ha empleado a David Lynch (Calvin Klein), Darren Aronofsky (Yves Saint Laurent) o Baz Luhrmann (Chanel) para sus carísimas campañas. Pero ni siquiera así puede estar totalmente a resguardo de las críticas. La campaña de Brad Pitt para Chanel n.5, que lo convirtió en el primer hombre en anunciar el legendario perfume de mujer, empezó a ser objeto de chanzas y parodias nada más estrenarse. Filmado en blanco y negro, Pitt aparecía con rostro serio, declamando palabras supuestamente profundas frente a la cámara. Eso sí, se cree que se llevó seis millones de euros por eos escasos segundos de metraje.

La elección de Johnny Depp sorprende porque el intérprete no pasa por su mejor momento de imagen pública. Hace unos meses The Telegraph publicaba un artículo titulado ¿Dónde se torció todo para Johnny Depp? y básicamente respondía a su propia pregunta con dos fechas: cuando se separó de su exmujer, Vanessa Paradis, y se convirtió en carne de tabloide por sus idas y venidas con su nueva esposa, Amber Heard, 23 años menor que él, y cuando se tomó como algo personal el fracaso de El Llanero solitario, en 2013. Depp acusó a los medios de tener inquina contra la carísima película, que se estrelló en la taquilla. Lo cierto es que el romance con la crítica que el actor vivió en los 90, cuando Marlon Brando le declaró el mejor actor de su generación, y sostenido hasta bien entrado el siglo, se ha torcido en los últimos años y alcanzó su punto más bajo con el estreno de Mortdecai, la comedia en la que comparte plano con Gwyneth Paltrow y que un diario reseñó como “psicóticamente antidivertida”.

Aun así, Depp podría haber iniciado su camino de vuelta al estrellato y no precisamente gracias al físico que le ha conseguido el contrato con Dior. En Black Mass, el thriller mafioso que protagonizará junto a un largo elenco en el que también están Benedict Cumberbatch, Dakota Johnson y Sienna Miller, aparece casi irreconocible, con una calva prostética y un maquillaje que le añade por lo menos una década. Además, Depp retomará en breve dos de los papeles que más alegrías le han traído, el de Sombrero Loco, en Alicia a través del espejo, y el de Jack Sparrow, en la quinta entrega de la saga de los piratas, que tiene previsto su estreno para 2017.