La nueva vida de Adriana Ugarte
Mientras paladea su éxito televisivo, la protagonista de 'El tiempo entre costuras' prepara teatro y amadrina carreras de coches
Adriana Ugarte es Sira Quiroga y Sira Quiroga es Adriana Ugarte: la actriz se ha convertido, desde ya, en historia de la televisión: el personaje más importante que ha dado el medio desde la aparición de los Alcántara hace ya más de 12 años (ay, Carlitos ¡cómo pasa el tiempo!). Y, claro, a ver cómo se quita una ahora el traje de época. Mejor sacar provecho y amadrinar carreras de coches antiguos, de aquellos con los que se paseaba por Tánger, Tetuán o Lisboa, en la Carrera Oris, organizada por la marca de relojes del mismo nombre.
Cuando estrenó Combustión dijo que, de ser un coche, le gustaría ser un Rolls Royce… ¿Se mantienes
¿Contesté eso? ¡Qué bobadas digo a veces! Pues creo que ha cambiado un poco mi opinión… Ahora diría que estaría feliz en un coche muy seguro, de líneas discretas y que a pesar de ser una joya no resulte llamativo…
Entre costuras pasaste toda una temporada: para la Gala de los Goya, ¿cuánto tiempo pasarás acicalándote?
Cerca de tres horas: desde que preparas la piel, manicura y pedicura, primer paso del pelo, rostro, chequear vestido, adecuar la tonalidad de brazos y piernas… ¡una eternidad! (risas)
Ahora anuncia relojes, teniendo en cuenta que gracias a Sira, la venta de máquinas de coser ha aumentado un 300%… ¿Cree que puede repetir?
¡Me encantaría! Pero no dispongo de una fórmula mágica secreta.
¿Es consciente de ser la primera heroína de la televisión en España? ¿Cómo le hace sentir eso? ¿Le tira la sisa o se encuentra a gusto?
Muchas gracias, pero creo que no soy una heroína, solo he hecho mi trabajo desde el corazón y el público me ha devuelto el esfuerzo con un afecto y una entrega apasionante.
Grandes dudas, sección Cuarto Milenio: ¿cómo es que nunca la vimos pincharse con una aguja durante el tiempo entre costuras?
¡Que sí que me he pinchado! ¡En una secuencia en la que estoy en el taller de Tetuán y suena el timbre inesperadamente! ¡Y en los ensayos muchas veces más! (más risas)
Dicen que El tiempo entre costuras fue una serie única, pero yo discrepo: para mí era El equipo A versión modista. Se planteaba un problema A, se desarrollaba y se solucionaba cuando usted aparecía vestida divina de la muerte… ¿Está de acuerdo?
Pues no sabría si El equipo A o Misión Imposible… pero por ahí van los tiros... Lo único de lo que estoy segura es que Sira ha tenido muy poquitos días de aburrimiento.
¿Y Adriana, se aburre?
No. Cuando descanso, paseo con mis perras, cultivo mis amistades y estoy con mi familia: esa es mi fuente de energía.
Ajá… Por lo menos aprovecha su día a día mejor que Sira, que en la serie estuvo cuatro años sin acostarse con un hombre. ¿Cómo se interpreta tanta tensión sexual no resuelta? ¿Se le hizo muy larga la espera?
La verdad es que no. Estaba tan ocupada en recuperar a Dolores –mi madre–, llegar a tiempo con todos los pedidos y saldar mi deuda infinita que el ámbito íntimo estaba el pobrecito un poco abandonado.
Le entrevisto por mail… No ha tenido tiempo de reunirte con nosotros: ¿estabasentre costuras o nos tiene manía?
¡¡Ah!! ¡Me hubiera gustado mucho! Estoy ensayando Tiempo sin aire: una reflexión acerca de la violencia y las consecuencias desastrosas que siempre trae consigo. La dirige Samuel Martín y Andrés Luque y tengo la suerte gigante de trabajar con Juana Acosta, Carmelo Gómez y Félix Gómez.
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