Bicis por la acera
Sin duda alguna, como ciclista que pedalea por Madrid a diario, también percibo el temor de los peatones hacia las bicis que circulan de forma indebida y temeraria por las aceras. Los ciclistas urbanos somos los primeros interesados en fomentar el uso de la calzada para circular en bici, y también los primeros en enfadarnos cuando vemos a supuestos “ciclistas” pedaleando a velocidad de vértigo que nada tienen que ver con las apropiadas para adaptarse al peatón cuando uno se sube a una acera —ancha— de forma prudente.
Pero también los ciclistas —y los peatones— somos los primeros en sufrir el caos del tráfico cuando circulamos por la calzada; la contaminación, el ruido y las velocidades de vértigo de los automóviles que consideran suya la ciudad. En fin, la supremacía a toda costa del coche respecto a las personas; caminen o pedaleen.
Esta es la opinión de un ciclista-peatón, que a veces circula con los pelos de punta por las calles de Madrid. Por la calzada.— Emilio Zuazua Huerta.