Arantxa y sus padres se dan dos meses para negociar
La familia Sanchez Vicario evita el juicio por la disputa de dos viviendas
Arantxa Sánchez Vicario y sus padres se han dado dos meses para intentar llegar a un acuerdo que les evite tener que ir a juicio. La extenista pretende retirar a sus padres la utilización de dos inmuebles de lujo: un piso de 200 metros cuadrados en la avenida Diagonal de Barcelona y una casa residencial con jardín y piscina en Sant Feliu de Guíxols (Girona).
El juicio por esa demanda debía celebrarse este jueves, pero la campeona de Roland Garros decidió ofrecer a sus padres la posibilidad de un pacto. Éstos lo aceptaron y ahora ambas partes tienen 60 días para negociar. La posibilidad de enfrentarse en el juicio había causado tensiones en la familia, hasta el punto de que los hermanos de Arantxa, que debían comparecer como testigos, excusaron su presencia.
El piso de Sánchez Vicario en Barcelona, un ático de lujo en pleno centro de la ciudad, está a nombre de una sociedad. Ésta cedió el usufructo a los padres, que viven allí desde hace 20 años. La extenista reclama ahora que le sea devuelta esa propiedad, entre otras cosas, para pagar los 3,5 millones que Hacienda le reclama.
Sánchez Vicario fue condenada por estafa al inscribir su domicilio en Andorra, cuando en realidad no vivía allí. La extenista ha defendido siempre que aquella decisión fue tomada sin su consentimiento por sus padres, a los que acusa de haberla dejado en la ruina.
La disputa de Arantxa con sus padres, que ha reflejado en su libro de memorias ¡Vamos!, ha desembocado en multitud de conflictos judiciales que aún deben dirimirse. Conscientes de la multitud de casos pendientes, las dos partes han querido buscar, en el caso de los pisos, un acuerdo amistoso.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.