Los nuevos ídolos de las adolescentes (y de sus madres)

Es una fórmula clásica, que la industria musical sigue con los ojos cerrados. Consiste en montar un grupo musical con vocalistas agradables de ver, destinarlo al público adolescente y tumbarse a escuchar los gritos de las jovencitas. Estas bandas prefabricadas masculinas, conocidas en el mundo anglosajón como boy bands, llevan décadas cosechando éxitos. Los años sesenta tuvieron a The Monkees, los ochenta a New Kids on the Block, los noventa a Take That y Back Street Boys. Hoy la receta sigue sin mostrar signos de declive, al menos en Gran Bretaña. One Direction, banda formada por cinco chicos menores de veinte años es responsable del último fenómeno de fans que promete conquistar el mercado estadounidense.

Niall Horan, Zayn Malik, Liam Payne, Harry Styles y Louis Tomlinson participaron en el proceso se selección de la edición británica del Factor X 2010. No pasaron la criba como solistas, pero los organizadores del programa decidieron unir retales y montar un grupo. Fueron bautizados como One Direction. Quedaron terceros en la competición, pero no les hizo falta ganar. Enseguida ficharon por Sony y eclipsaron al ganador, el albañil Matt Cardle. Antes de que se acabase el concurso, tenían legiones de admiradoras que les seguían a todas partes con la abreviatura 1D escrita en la cara.

A diferencia de recientes boy bands, los integrantes de One Direction no presumen de torsos musculados, no siguen elaboradas coreografías en el escenario y su contribución al panorama pop es jovial, liviana y sin connotaciones callejeras. Sus integrantes, procedentes de varias ciudades de Inglaterra e Irlanda proyectan una imagen de juventud privilegiada: un compendio de canciones de amor alrededor de una hoguera en la playa, parafernalia de colegio privado británico y vacaciones en estaciones de esquí. Esta imagen de niños buenos está funcionando. Su primer sencillo What makes you beautiful, alcanzó el número uno de la lista de singles y su álbum de debut, Up All Night, publicado a finales del año pasado, lleva medio millón de copias vendidas. Tampoco les faltan ofertas publicitarias y ya han firmado un lucrativo contrato con Nintendo.

Lo más curioso del fenómeno es que el grupo revoluciona tanto las hormonas de las adolescentes como las de sus madres. Y ellos dan esperanzas a ambas. Durante la grabación de X Factor, Zayn Malik estuvo saliendo con otra de las concursantes, la madre de dos hijos Rebecca Ferguson. Harry Styles, el rompecorazones de los rizos despeinados mantuvo una relación con la presentadora de televisión de 32 años Caroline Flack. Los quince años de diferencia entre ellos no pasaron desapercibidos para las incondicionales de la banda, que llegaron a amenazar de muerte a Flack. Styles se resiste a desaprovechar su tirón entre las maduritas: “Me encantan las cougar (mujeres que salen con hombres más jóvenes)”, declaró el cantante. “Mi límite está en los 43 años, que son los que tiene mi madre”.