El Homo mochilerus puede pertenecer a tribus muy diferentes, pero con un rasgo en común: la maleta colgada a la espalda.
1.- El mochilero pijo o pija
(Aka* cuico, pelolais, fresa, sifrino, posh, swank, spoilt brat, snooty, huppé...). Para el trekking, ¿me llevo las Vans o las Converse? Y la mochila, ¿de Cash Ca? ¿de Comme des Garçons? ¿de Blind Chic? Jo, qué dilema, osea.
(*Aka: also known as, también conocido como).
2.- El Boy-Scout (o Girl-Scout)
¿Has hecho ya tu buena obra del día?
3.- El neo-hippie
Algunas mentes malvadas lo llaman perroflauta, aunque también toca los bongos. Domina las arts & crafts y las técnicas malabares. Sus señas de identidad son las rastas. Suele arroparlo un humo dulzón, como de hojas quemadas.
4.- El mochilero “DiCaprio”
Como en la antigua Unión Soviética, su territorio lo señalan las siglas CCCP (Chill Out, cibercafé, playa y chiringuito). Lugares de nombres sonoros como gongos: Koh Pha Ngan (Tailandia), Vang Vieng (Laos), Kovalam o Malipuram (India). De hábitos nocturnos, su momento de mayor actividad se suele dar durante el Full Moon Party, las fiestas de la luna llena.
5.- El mochilero mochilero
Él es diferente, el Mochilero Genuino. Viajero curtido y orgulloso, huye de los lugares “turísticos” como de la peste. Llámale turista y verás con qué cara te mira. Al Homo mochilerus mochilerus le gusta estar fuera del rebaño, aunque al final acabe junto a otros ejemplares como él en destinos clónicos como Manali (India), Hikkaduwa (Sri Lanka) o Goa (India).
6.- El urbanita
Su selva preferida es la de asfalto. Su hoja de ruta la marcan los vuelos low cost. Su arquetipo de ciudad, Berlín.
7.- El montañero
Calza pies de gato o botas con crampones. Sus distancias se miden en vertical. Su frase favorita: “Porque está ahí.” La de quienes siguen su ascensión desde abajo: “¿Por qué está ahí?.”
8.- El mochilero calimocho
Turista de pedal (pedal de pedo, borrachera, no de bicicleta) y vuelo chárter, suele marcar su territorio (la playa del Arenal, en Palma de Mallorca, o la de Las Américas, en Tenerife, por ejemplo) con pis o pota.
9.- El místico
Lleva escritas en la frente las siglas TM (Transcendental Meditation). Su Ítaca son los ashrams de Rishikesh y los ghats de Benarés, en la India. También existe la versión Camino de Santiago.
En dos versiones: profesional liberal con tiempo y posibles para recorrer África o Sudamérica de punta a punta, o joven parado con ganas de ver mundo y enorme imaginación para dormir barato y comer por cuatro duros.
¿Te ves reflejado en alguno de estos ejemplos?
Comentarios
Muy divertido! Yo hace unos 400 años era girl scout. De acampar en tiendas con agujeros, sin suelo etc... No money. No nada. La pasábamos bomba.Un abrazo!
Qué vergüenza que alguien que se llame a sí mismo viajero escriba algo así. Pero en fin, si tu definición como viajero es desayunar con Mickey Mouse en Disneylandia, pues poco se puede esperar de ti.
Ingenioso artículo. Me siento reflejado en parte en varios de estos mochileros.El comentario de F.M. es de muy mala "baba". ¿No tiene otra cosa que hacer mejor?
¡Vaya, hombre, para una vez que me ha hecho gracia a mí se mosquea FM!
Bueno FM, yo tampoco espero mucho de tí. Y desayunar con Mickey Mouse es agradable: no habla.
Yo agregaría un tipo de viajero como el comentarista F.M.: un agreta al que nada le viene bien y nunca tendría que haber salido de su barrio. Además, no con el espíritu curioso o ahorrativo sino de puro mentecato y tacaño se sienta en un bar y vuelve loco al camarero con mil preguntas sobre todos los drinks y comidas accesibles al cliente, para terminar compartiendo un capuccino - con algún acompañante de su misma tribu.
Una correccion: en el punto 4 Vang Vieng esta en Laos, no Vietnam. El post me ha parecido muy divertido!
¿Podemos eliminar el comentario de la tal Haydeé? Quizás darle el pasaje de vuelta con los pingüinos, podría funcionar también...
Bien, yo estoy en el 5 y parte del 7. Es totalmente cierto que huyo de las rutas trilladas y las masificaciones como si huyera del demonio. Aunque no soy agresivo, llámame turísta, y verás la de ostias que te pego.
Gracias, Rorto, por avisarme del error. Ya lo he corregido. Saludos.
Pues yo soy de los últimos y en estos momentos ando recorriendo Sudamérica de punta a punta. El post es muy bueno!!!http://www.caminoaitaca.com
Genial el artículo, aunque quizá faltaría hablar de los adictos a las pulseritas "Todo incluido".Yo soy de las del tipo 6, aunque mi objetivo es llegar a ser del tipo 10, y visto como está el tema laboral, no creo que sea difícil llegar a serlo.
mezcla de 3 y 6
Sin lugar a dudas, soy el 5 y el 7.
¿Confucio Confundido? JAJAJAJAJAJAJAJA... ¡Con lo que a mí me gusta derrocar mitos!
Como nuestro propio nombre indica, nos quedamos claramente con el homo viajerus sabáticoparado!
Muy buena la descripción, no sólo hay una manera de viajar de mochilero. Yo soy del tipo 10, pero del malo, el del joven parado con imaginación y mi meta es seguir en el 10, pero de los que tienen un curro que les proporciona tiempo y dinero. ¡tiempo libre y dinero! ¿eso existe?
Me identifico al 100% con el mochilero urbanita. No me gusta "pisar praos" pero no tengo escrúpulos a la hora de tirar de low cost. Con ir ligero de equipaje bast para ahorrarse unas perrillas que luego invierto en un hotel mejor.
Me ha gustado mucho el post, porque al fin y al cabo, ser mochilero también es una pose y una moda. Me gustaría pensar que soy el 5 (la auténtica entre las auténticas) pero también es verdad que a veces me toca aguantar a la marabunta. No vas a ir al norte de India y te vas a marchar sin ver el Taj Mahal, ¿no? Soy urbanita y low cost y sueño con dar la vuelta al mundo, aunque para eso mi hijo tenga que andar ya por si mismo ;)
Genial el artículo, una buena guía para conocer al mochilero. Hace años que oba con la mochila, aunque ahora cambié a la maleta de ruedas, porque la espalda acaba echa polvo al cabo de los años...
Abrimos nuestro hostal en una ciudad colonial de Colombia hace 9 meses y poco a poco mi novia y yo estamos haciendo una clasificación de personas que nos visitan. Evidentemente, es una simplificación, pero es interesante para que veáis lo que se piensa y ve desde el otro lado de la recepción. - Los que no sonríen: aquellos viajeros que me sorprenden más de todos (negativamente), son los que entran en el hostal y no les ves sonreír ni una vez. Pareciera que viajar es una actividad interesante, divertida y enriquecedora. Así lo veo yo, que he viajado mucho. Pero esta gente, sobre todo jóvenes, viajan seguramente por una presión social (otros lo llamarían moda) que les obliga a hacer sus mochilas y partir hacía una actividad, que después de probrarla, les da vergüenza decir que no les satisface o divierte. El viajar no es para todos, vuelve a casa.- Los que viajan de hostal a hostal y de bar a bar: otro grupo de extraño interés son los viajeros que no les interesa la cultura del país, solo pasearse por él. Por ello van de una ciudad a otra y apenas visitan los lugares de interés turístico. Sólo se sientan en el hostal con su computadora en mano (seguramente con el Facebook abierto) y se pasan todo el día conectados o esperan a que el sol se esconda para dedicarse a la nocturnidad. Hasta que un día deciden moverse al siguiente sitio. Una curiosidad de esta gente es que en vez de decir he estado en, dicen he hecho tal.- Los viajeros empedernidos: Con los que más cómodo me siento, ya que me considero uno de ellos. Normalmente como dueño de un hostal la primera impresión de este tipo de viajero no es la mejor, ya que casi siempre piden descuentos o te miran mal al decirle los precios. Pero luego es la relación perfecta. Acostumbrados a casi todo tipo de calidades desde el lugar horrible hasta el medio; cuando les ofreces un hostel, como el nuestro, cómodo, bonito y hogareño te lo agradecen y mucho.- Los que necesitan que decidas por ellos: Hay gente que no se como viajan. Viajar es visitar lugares y para llegar a esos lugares hay que realizar muchas decisiones. Pequeñas, grandes, muchas sin apenas importancia, pero decisiones al fin y al cabo. No tienes libertad de movimiento, tienes tu casa en la espalda y un presupuesto que en principio has de mantener. A mí viajar me ha dado la oportunidad de aprender a jerarquizar mis pensamientos y sensaciones, y ver de antemano las consecuencias de esa decisión para así poder elegir de forma más libre y eficaz. Hay personas que no pueden decidir. Que en el momento de la elección se giran hacia ti y esperan que con un gesto o con palabras, decidas por ellos. Normalmente emiten solo preguntas.- El que hace yoga en la sala de la tele: Normalmente personajes muy tranquilos y agradables. Su pregunta preferida es ¿donde puedo comer comida vegetariana? Viajan con calma, sin prisa. Indudablemente son uno de nuestros mejores clientes, ya que tienen que cuidar su chi, no hacen ruido, se meten pronto en la cama y, como todo lo toman con mucha calma, pasan más días que la media en nuestro hostel.- Los antiguos viajeros, siguen viajando: Así como los viejos rockeros siguen limpiando sus Harleys y las sacan de paseo a diario; los viajeros somos también una especie que perdura en el tiempo. Después de poner el hostal me he dado cuenta de que si la salud acompaña, volveré a viajar después de jubilarme (o cansarme). Así lo hemos visto aquí. Viajeros de 70-60 años que deciden volver a sus años mozos, cogerse su mochila (normalmente mucho menos pesada) y lanzarse a un viaje que años atrás seguramente hicieron. Es interesantísimo hablar con esta gente de cómo ha cambiado el mundo. - Los motorizados: Son normalmente solitarios (por algo habrán elegido un medio de transporte como la moto), viajan rápido (se quedan poco en el hostal) y tienen voces roncas. 90% hombres, 10% mujeres. - Los que no les importa el dinero: Viajan de hostel en hostel. Pero cuando han de salir a cenar, hacer tours o beber, no les importa pagar por una botella de vino de 15 euros día sí y día también. Normalmente la primera pregunta que recibes de este tipo de gente es, ¿qué tours teneis? En esta categoría también se puede integrar los personajes de duermo en un hostel, pero espero un hotel de 5 estrellas (no son todos los que son).- El artesano: Es el que menos tiempo pasa en nuestro hostal. Normalmente cuando tocan el timbre y veo a alguien con rastas y con sus artesanías colgando, sé que nuestra relación va a ser bien corta. Preguntan el precio, les contesto y algunos hasta preguntan por un lugar más barato. Por cierto, en Sudamérica no viajan con perro. - Los mono tono: Aquellas personas que sean las 3 de la mañana o las 3 de la tarde, utilizan el mismo nivel de voz. Normalmente, es aquel tipo de viajero que siempre llega de madrugada al hostel, que enciende la luz del dormitorio a pesar de que hay gente durmiendo en ese momento, deja los trastos de la cocina sin limpiar, etc. Sin duda, sus madres estarían orgullosos de ellos.Y habría que definir bien lo que es mochilero, porque los viajeros de fin de semana no considero que lo sean. El mochilero en mi opinión es alguien que mete todas o casi todas sus pertenencias en una mochila y se lanza a un viaje de meses o años.
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Redactor del diario EL PAÍS especializado en viajes y turismo. Ha desarrollado casi toda su carrera en el suplemento El Viajero. Antes colaboró como fotógrafo y redactor en Tentaciones, Diario 16, Cambio 16 y diversas revistas de viaje. Autor del libro Mil maneras estúpidas de morir por culpa de un animal (Planeta) y del blog El viajero astuto.