Cronología del juicio al alcalde de Ponferrada por acoso sexual
La tarde del 26 de marzo de 2001, una mujer dimitió de su puesto de trabajo al tiempo que, entre sollozos, denunciaba acoso sexual por parte de su jefe, pero no era un caso cualquiera. Ella, Nevenka Fernández, era la concejala popular de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada (León) y el denunciado, Ismael Álvarez, el alcalde de la localidad del mismo partido y parlamentario en Castilla y León.
Nevenka, soltera, 26 años y Licenciada en Empresariales en el San Pablo-CEU con un máster en Auditorías por la Complutense, relató entonces en rueda de prensa que ella e Ismael, viudo de 49 años, mantuvieron una relación durante poco menos de cinco meses a partir del otoño de 1999, tras enviudar el alcalde.
La concejal puso fin a la relación, lo que dio paso a "un infierno" de "notas manuscritas, mensajes en móvil, cartas, comentarios hirientes, descalificaciones, actos y vejaciones sexuales" que atentaron contra su integridad física y psíquica'.
Esta insoportable situación provocó que Fernández solicitara la baja por depresión en septiembre de 2000, después de tan sólo 13 meses como concejal de Hacienda, y su huida a Madrid, donde se sometió a un tratamiento con ansiolíticos. Después de seis meses de baja, la concejal dimitió de su cargo tras presentar una querella contra el alcalde.
"Rotundamente falsa"
Ante esta denuncia, el regidor respondió que era "rotundamente falsa" y que la mujer busca su "destrucción política". Pero los tribunales admitieron la demanda, lo que llevó a Álvarez a pedir al PP la suspensión temporal de su militancia hasta la celebración del juicio, aunque no renunció a su cargo ni como alcalde ni como procurador regional.
En febrero de 2002, la Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, con sede en Burgos, admitió todas las pruebas documentales y periciales presentadas por las partes y fijó para la segunda semana de abril el inicio del juicio contra Álvarez por un presunto delito de acoso sexual y dos más de lesiones y coacciones a la ex concejal.
Un año y medio después de la denuncia, el pasado 29 de abril, comenzó el juicio en Burgos, el primero de estas características en España, por el que pasarán un total de 40 testigos en dos semanas: 10 de los 16 concejales del Ayuntamiento, amigos y cargos del PP.
La Fiscalía pide 15 fines de semana de arresto y un millón de pesetas de indemnización, mientras que la acusación particular reclama la inhabilitación especial para cargo público y una indemnización de dos millones de pesetas (12.000 euros) más 10.000 pesetas al día por las secuelas. La defensa del alcalde pide la libre absolución. El PP regional guarda silencio sobre el juicio.
"Despecho"
Desde el primer día, el juicio ha estado rodeado de polémica ya que el acusado, Ismael Álvarez, dijo en el tribunal que el acosado era él. "Saber el porqué de la querella es difícil. Le he dado mil vueltas..., puede ser despecho, celos amorosos y profesionales, enfermedad, venganza. ¡Es tan increíble!", declaró.
En la primera semana, testificaron los concejales de Ponferrada del PP que quisieron calificar a Fernández, a preguntas del fiscal, como la "niña bonita" del equipo de Gobierno, que había suscitado, sin duda, muchas envidias entre ediles "menos preparadas" pero "más antiguas" en el partido.
También testificó el 1 de mayo la propia Nevenka, que relató detalladamente las vejaciones y asedios que sufría por parte del alcalde. Durante su intervención en el juicio, se produjo un episodio que todavía levanta ampollas entre las asociaciones de mujeres y que llevó a la Fiscalía General del Estado a apartar del caso al fiscal, José Luis García Ancos.
El fiscal, José Luis García Ancos, la sometió a un durísimo interrogatorio en el que llegó a preguntarle por qué no dimitió antes de su cargo "si no es una cajera del Hipercor de Burgos" que tiene que aguantar cachetadas en el culo "por el pan de sus hijos". Ante esta actitud, el presidente del tribunal, José Luis de Pedro, tuvo que recordarle que la ex edil era una testigo y no la acusada. Ancos mantuvo su actitud ante los medios de comunicación, lo que le valió duras críticas de asociaciones feministas y del jefe de la Inspección Fiscal, Juan José Martínez Zato, que propuso su relevo.
Sustitución del fiscal
Cardenal sustituyó a Ancos, visto un informe de Martínez Zato, por el número 2 en la fiscalía de Castilla y León, el teniente fiscal Gregorio Segurado. Iniciado de nuevo el juicio, el 12 de mayo, fue el turno de cinco concejales del equipo de gobierno del ayuntamiento de Ponferrada, del PP, que declararon desconocer desconocían la existencia de episodios de acoso a Nevenka, por parte del Ismael Alvarez y definieron la actitud de Nevenka de "teatro".
Varios testigos, entre ellos miembros de la Junta de Castilla y león, declararon que en junio de 2000 Ismael y Nevenka continuaban juntos, lo cual se contradecía con las declaraciones de la ex concejal, que había asegurado que la relación no fue más allá de diciembre de 1999.
El último episodio del juicio ha sido las declaraciones de los peritos, el día 16 de mayo, en las que coincidieron que el cuadro de síntomas que presentaba Nevenka Fernández corresponde al de una víctima de acoso sexual. También señalaron que no apreciaron síntomas de fabulación en la querellante y detallaron que estaba nerviosa, con muestras de angustia y deseos de salir de su situación.
El fiscal de la vista mantuvo en su calificación final la acusación de un delito de acoso sexual para Ismael Alvarez por el que solicita quince fines de semana de arresto y una indemnización de 6.000 euros.
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