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Iberdrola urge a Endesa a aclarar el futuro de la central de Garoña

La compañía de Galán ha pedido por burofax la celebración de un consejo y una junta para decidir si se cierra definitivamente

Manuel Planelles

Iberdrola lo tiene claro: las cuentas no salen para reabrir la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), que lleva cuatro años parada. Endesa no termina de aclarar su postura, y prefiere esperar a que se pronuncie el Gobierno, que analiza el permiso para que pueda volver a operar. Ambas compañías comparten al 50% la propiedad de la central y tienen que entenderse en el seno de Nuclenor, la propietaria oficial de Garoña. Iberdrola pidió la semana pasada a través de un burofax la celebración de un consejo y de una junta general extraordinaria para resolver este asunto.

Ignacio Sánchez Galán en la última junta de accionistas de Iberdrola.
Ignacio Sánchez Galán en la última junta de accionistas de Iberdrola. FERNANDO DOMINGO-ALDAMA

El escrito, según fuentes de las compañías eléctricas, fue enviado el 29 de marzo y estaba dirigido a Nuclenor y a Endesa. Y se solicitaba la celebración del consejo y una junta general extraordinaria "para tratar la presentación del escrito de desistimiento de solicitud de renovación de la autorización de explotación" de Garoña. Ambas compañías decidieron desenganchar de la red la central hace cuatro años. Pero Nuclenor solicitó en mayo de 2014 volver a reabrirla y operar hasta 2031.

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Iberdrola defiende ahora que reabrir —para lo que se necesitaría una inversión de 200 millones— no es rentable. Endesa insiste, sin embargo, en que por el momento prefiere "esperar hasta que se pronuncie el Gobierno", que se ha dado un plazo de seis meses para decidir si le concede o no la licencia para la reapertura.

Desde la petición de celebración del consejo, adelantada este martes por los periódicos del grupo Vocento, hasta su celebración puede pasar como mucho un mes, con lo que, como tarde, esa reunión se debería celebrar a final de mes. De momento, las posturas de las dos eléctricas siguen enfrentadas. Y desde el Ministerio de Energía un portavoz sostiene que este departamento no ha recibido ninguna comunicación oficial de Nuclenor ni de las eléctricas. Por lo que el ministerio sigue con el plan de abrir unas consultas (con partidos, empresas y agentes sociales) durante seis meses antes de decidir.

Ese plazo comenzó a correr a principios de febrero, cuando el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) informó favorablemente de la reapertura de la central. Pero la última palabra la tiene el Gobierno.

Iberdrola, mientras el CSN analizaba el expediente, ya señaló que no consideraba viable reabrir la central. Pero el viernes pasado el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, fue más explícito aún al anunciar, durante la junta general de accionistas de la empresa, que había pedido a su socio en Garoña, Endesa, cerrar definitivamente la central porque "es económicamente inviable". Su competidora reaccionó ese mismo viernes de forma airada y criticó que un anuncio así se hiciera durante la junta de accionistas. 

Inversiones sin realizar

Pero, días antes, Iberdrola había enviado a Endesa el burofax en el que se pedía convocar el consejo y la asamblea de Nuclenor para abordar el desistimiento de la solicitud de renovación.

En verdad, los pasos hacia la no reapertura comenzaron antes, a finales de 2015. Entonces las dos compañías interrumpieron las inversiones en la central que le había solicitado el CSN para poder pronunciarse sobre la reapertura. Esas obras, según dijo el CSN en varias ocasiones, debían estar completadas antes de que pudiera emitir el informe final. Sin embargo, el supervisor luego cambió de opinión y, a pesar de que no se habían realizado, informó favorablemente sobre la reapertura, aunque condicionándola a que se realicen esas obras de mejora antes de volver a operar.

Además de ser la más antigua de España, Garoña es una central muy pequeña. Y cada día que pasa es más complicado que se pueda rentabilizar esa inversión de unos 200 millones que ambas compañías reconocen que tienen que gastar para poder volver a producir electricidad.

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Sobre la firma

Manuel Planelles
Periodista especializado en información sobre cambio climático, medio ambiente y energía. Ha cubierto las negociaciones climáticas más importantes de los últimos años. Antes trabajó en la redacción de Andalucía de EL PAÍS y ejerció como corresponsal en Córdoba. Ha colaborado en otros medios como la Cadena Ser y 20 minutos.

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