Amazon decepciona pese a triplicar el beneficio

Amazon escaló hasta convertirse en la cuarta mayor compañía cotizada en Wall Street. Pero pese al tamaño de su negocio y la influencia de su marca, la multinacional de Seattle es muy inconsistente al traducir la sólida expansión de sus ventas en beneficios y eso despista a los inversores. Es lo que pasó tras publicar los resultados del tercer trimestre, lo que provocó que sus títulos se desplomaran un 7%.

El portal de comercio electrónico registró en el tercer trimestre un incremento del 30% en las ventas, hasta los 32.700 millones de dólares. La facturación acumulada en los primeros nueve meses del año asciende a 92.245 millones. Esta cifra de negocio le aportó un beneficio trimestral de 252 millones, lo que representa un incremento anual del 220%. Para el conjunto del ejercicio la ganancia neta es de 1.622 millones.

Amazon Web Services, que ofrece a las grandes empresas la infraestructura para la gestión y el almacenamiento de datos, es la joya oculta de la compañía fundada por Jeff Bezos. Esa división le aportó unos ingresos trimestrales por valor de 3.230 millones, lo que representa un incremento anual del 55%. Su negocio de comercio electrónico creció un 28%, a 29.935 millones.

Bezos prefiere invertir el efectivo que genera en diversificar su negocio antes que devolverlo a los accionistas. Lo que empezó como un portal para vender libros y artículos electrónicos, es ahora un conglomerado que ofrece todo tipo de productos, crea su propio contenido audiovisual, maneja su flota de aviones y se dispone incluso a abrir sus propios supermercados.

El servicio de gestión de datos está contribuyendo a mejorar su margen de beneficio. En paralelo, su portal de comercio electrónico se está apoyando cada vez más en vendedores terceros. Eso también contribuye a mejorar la ganancia. La competencia con Netflix y las cadenas de televisión tradicionales, sin embargo, le obliga a invertir más en la creación de contenido para retener a los abonados a Prime.