El regreso de las dudas sobre el crecimiento tiñe las Bolsas de rojo

El regreso de las dudas sobre el crecimiento de la principal economía europea, Alemania, lastra los parqués del Viejo Continente. Todos los selectivos continentales ha acabado la sesión en negativo, en una jornada marcada por la presentación de un mal dato de pedidos industriales en el país germano y un cierre bajista en las principales plazas asiáticas, con el Nikkei japonés al frente de las pérdidas. Al cierre, el Ibex 35 español ha caído un 2,44% con solio un valor, Aena, en positivo. La misma tónica han mantenido Fráncfort, París y Londres.

Las dudas sobre la evolución de la locomotora comunitaria, Alemania, han vueltoal centro de las preocupaciones de los inversores. La publicación del dato de pedidos industriales en el país germano ha dado al traste con la tranquilidad que parecía haberse instalado en las últimas semanas, tras un inicio de año marcado por la zozobra y las pérdidas bursátiles. El dato de pedidos industriales en febrero, publicado este martes, ha sido el último detonante del pesimismo. Las fábricas alemanas vieron como la demanda caía un 1,2% interanual en febrero, su peor dato en medio año y muy por debajo de lo que preveían los analistas del panel de Reuters. En términos interanuales, los pedidos subieron un 0,5% en febrero, pero se quedaron muy por debajo de lo previsto (2,2%).

La notable mejora del dato revisado de enero, que queda definitivamente en el +0,5% intermensual, frente al -0,1% de la primera estimación, no ha sido suficiente para compensar la ola de dudas sobre la salud real del sector secundario germano, muy expuesto a la evolución de la economía europea —y global— por la vía exportadora. Es, por tanto, un síntoma de la débil demanda mundial y un aviso a navegantes sobre lo que puede estar por llegar. "Confirma el enfriamiento", subrayaba Guillermo Hernández Sampere, jefe de trading de la gestora alemana MPPM, en declaraciones a Bloomberg. "Las últimas medidas del BCE no han logrado reducir la aversión al riesgo y la confianza del consumidor todavía no ha regresado".

A este mal dato alemán se añaden las últimas palabras de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, que este martes ha dejado caer que el organismo que comanda revisará a la baja su previsión de crecimiento mundial la semana que viene. "Seré clara: estamos en situación de alerta, no de alarma. Pero ha habido un descenso en el ritmo de crecimiento mundial". No es la primera vez que Lagarde subraya los peligros que acechan el débil crecimiento mundial, pero este martes ha sido especialmente explícita. "La recuperación tras la crisis financiera sigue siendo demasiado lenta, demasiado débil y los riesgos sobre su durabilidad siguen creciendo", ha remarcado.

En el bajo estado anímico de los inversores ha pesado durante buena parte de la sesión en la caída del precio de las materiras primas. No obstante, el barril de crudo brent, la referencia petrolera en Europa, se ha ido recuperando durante la jornada y ha cotizado plano, aunque sigue por debajo de  la barrera psicológica de los 40 dólares con la que ha flirteado durante todo el mes de marzo. La sobreoferta, pese a la paulatina reducción de la producción en la primera potencia mundial, Estados Unidos, y en algunos países del cartel de la OPEP no es suficiente. Y la demanda sigue sin repuntar al ritmo de anteriores recuperaciones económicas.