Cavallo niega que el FMI le exigiera la devaluación del peso ni "ajustes enormes"
El organismo pide a Argentina que que cumpla con las metas ya previstas en materia impositiva y de déficit
Tras la reunión mantenida este fin de semana con el Fondo Monetario Internacional, el ministro de Economía argentino, Domingo Cavallo, ha asegurado que el FMI no ha exigido ni la devaluación del peso ni "ajustes enormes" en el gasto público como condiciones para desbloquear el desembolso de los más de 1.200 millones de dólares de ayuda a la grave crisis económica. Lo que sí ha exigido el Fondo Monetario a Argentina es que cumpla con las metas ya previstas en materia impositiva y de déficit.
Sin embargo, en la reunión con los medios de comunicación mantenida con Cavallo esta noche tras su llegada de Washington, el ministro no ha desvelado grandes detalles y prácticamente se ha dedicado a desmentir las versiones de la prensa argentina sobre un nuevo plan de recortes del gasto público y sobre una posible devaluación, cuyo rumor planea incesantemente en los últimos días.
Los principales diarios de Buenos Aires habían dado por seguro que el FMI había condicionado el desbloqueo de un desembolso, que Argentina requiere para el pago este mes de intereses de la deuda pública, a un recorte del gasto público de 4 millones de dólares en el presupuesto del año próximo.
Duras críticas a la oposición
Tras insistir en que esas versiones "son falsas", Cavallo ha dicho que las autoridades del FMI "están sorprendidas por la falta de realismo de alguna parte de la clase política", en obvia alusión a los sectores de la oposición que en el Parlamento votaron en contra de recortes del gasto público.
El ministro ha dicho que no se descarta suprimir este mismo lunes los beneficios impositivos dispuestos en los planes de competitividad, a los que culpa de la grave caída de la recaudación fiscal en los últimos tres meses.
El Gobierno necesita asegurar su plan déficit cero en las cuentas para conseguir el apoyo del FMI, con el que despejará el peligro de caer en la suspensión de pagos, en un momento en que Argentina se prepara para completar su propuesta de reprogramación de la deuda pública.
Cavallo ha negociado duramente con el FMI para que aprobara el desembolso pendiente de 1.264 millones de dólares a su país, imprescindible para pagar los intereses de la deuda pública que vencen en diciembre.
