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ESCÁNDALO FINANCIERO.

La ONCE cuestiona ahora que su Fundación sea socio de Gescartera Dinero

El presidente, José María Arroyo, asegura que "existe una duda razonable" sobre la donación del 10% de las acciones.- La supuesta entrada de la organización en la estructura de la agencia permitió su ascenso de categoría

El presidente de la ONCE, José María Arroyo, ha asegurado que "existe una duda razonable" de que la Fundación ONCE sea socio de Gescartera Dinero, ya que no existen documentos de que se llegara a efectuar a su favor la donación del 10% de las acciones de la agencia de valores.

Así se recoge en una de las conclusiones de la investigación interna realizada por la ONCE a raíz del caso Gescartera, leídas ante la prensa por Arroyo, en las que también se señala que "actualmente hay base para dudar con fundamento de que la Fundación ONCE ni haya sido, ni sea, socio de Gescartera Dinero".

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Arroyo ha manifestado que ni la ONCE ni la Fundación han encontrado el título de adquisición de las citadas acciones y ha añadido que la única constancia pública de esta participación accionarial es lo manifestado ante notario por Gescartera Dinero a la hora de transformarse en agencia de valores.

El presidente de la ONCE ha indicado que de inmediato se actuará en vías judiciales para clarificar la verdad sobre esta supuesta titularidad de las acciones de Gescartera Dinero, ya que ni el propio secretario del consejo de Gescartera, que fue requerido notarialmente por la ONCE, ha podido aclararlo.

Responsabilidad patrimonial

Sobre la responsabilidad patrimonial de la Fundación ONCE si finalmente se demuestra que era propietaria del 10% de Gescartera Dinero, Arroyo ha indicado que "son los jueces quien lo tendrán que dirimir", aunque lo que dejó claro es que la ONCE no tiene "ninguna responsabilidad".

En la investigación interna de la ONCE se señala a los dimitidos Rafael de Lorenzo (ex-vicepresidente ejecutivo de la Fundación) y José Manuel Pichel (director general) como únicos responsables y conocedores de las inversiones de la Fundación ONCE en Gescartera, de las que no informaron en ningún momento al Consejo General de la ONCE ni al Patronato de la Fundación como era su obligación.

Además, el informe señala que la decisión de Pichel de convertirse en consejero delegado de Gescartera fue "a título personal" y no en representación de la Fundación ONCE.

"El Consejo General de la ONCE no tenía conocimiento alguno sobre las inversiones en Gescartera", ha señalado Arroyo, quien pese a reconocer que en algunos casos tiene "difícil explicación", ha añadido que "no somos corruptos y nos defenderemos con los mecanismos del Estado de Derecho".

Tanto Arroyo como el vicepresidente de la ONCE, Mario Loreto, han asegurado tener constancia de que De Lorenzo y Pichel no se han enriquecido personalmente en este caso y han precisado que "cometieron errores y no informaron (...) pero hablar de engaño en sus actuaciones es diferente".

Pese a esto, tanto las auditorías internas como externas realizadas desde 1998 -momento en el que la Fundación de la ONCE comienza a invertir en Gescartera- reflejaban las cantidades invertidas en la agencia de valores como activos del Tesoro, procedentes de puntas de tesorería.

En este sentido, Arroyo no ha explicado -pese a ser preguntado- si existe alguna falsificación de papeles para que las auditorías interna o externa dieran por buena esa supuesta inversión en activos del Tesoro.

Otra de las conclusiones de la investigación pone en evidencia que en el proceso de conversión de Gescartera en agencia de valores, la Fundación ONCE no fue notificada por nadie, ni tampoco la ONCE, de que las autoridades supervisor as condicionaron la entrada de la organización de ciegos en Gescartera para elevar su categoría.

El informe de la ONCE, elaborado a partir de una investigación iniciada el pasado 18 de junio, concluye que ni la ONCE, ni su presidente, han recibido indicaciones del Gobierno sobre sus inversiones.

Además, señala que la Fundación ha sido estafada en la cifra de 540 millones de pesetas y "altamente perjudicada en su prestigio como entidad líder en la integración social de personas con discapacidad".

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