"Si Piqué no conocía la regla, ya la sabe"

El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, no se esconde. Sí, Gerard Piqué, se entretuvo en el saque de una falta, toqueteándose las medias, con el partido ya decidido (4-0 contra el Rayo en el Camp Nou) y en los últimos minutos del mismo. Lo hizo, obviamente, porque sumaba cuatro amarillas y no quiere fallar a su cita con el Madrid en el Bernabéu el próximo día 10. Pero, eso sí, lo hizo por iniciativa propia.

La sanción impuesta al central azulgrana por el Comité de Competición (que no ha entrado a valorar la voluntariedad del jugador al forzar la tarjeta) es solamente de un partido, la misma que impuso a dos jugadores del Levante (Barkero y Juanlu), que también vieron la quinta amarilla y no podrán jugar precisamente contra el Barça esta noche, que además de a Piqué pierde a Adriano por lesión.

"El Comité ha dado su opinión y la aceptamos, si hubiera sancionado con más partidos lo habríamos aceptado de la misma manera. Las imágenes hablan por sí solas. Si Gerard no conocía el reglamento, ahora ya lo sabe; que cumpla la sanción y veremos si está disponible para el próximo partido", apuntaba Guardiola, que negaba con la cabeza el martes pasado instantes después de ver cómo Pérez Lasa amonestaba a Piqué. "No entrenamos estas cosas, es perder tiempo. Si lo preparásemos no se hubiera hecho así", sentenció.

El entrenador del Madrid, José Mourinho, a quien la UEFA abrió expediente disciplinario y sancionó con dos partidos por animar a Ramos y Alonso a forzar la segunda amarilla contra el Ajax el curso pasado, no quiso hacer valoraciones al respecto: "Mi opinión no es importante. Para mí es más interesante la opinión de los juristas o voces autorizadas en el mundo jurídico del deporte como Platini, Blatter, Collina y la prensa. Mi opinión no cuenta para nada", aclaró.

Guardiola, por su parte, quiso aparcar el próximo encuentro de Liga, contra el Madrid ?a tres puntos en la clasificación, además de sumar un partido menos que el Barça?, para centrarse primero en el Levante y, luego, en el Bate, próximo rival en la Champions. "Tenemos que seguir siendo lo más regulares posible; solo hay que dar importancia a lo que hagamos nosotros. Algunos errores más no sé si nos permitirán cogerlos", afirmó en referencia al líder de la Liga.

El entrenador alentó a sus jugadores, con mejores números en casa (donde no ha encajado ni un gol) que lejos de su estadio, a seguir siendo competitivos: "Estamos aquí para ganar títulos, otra cosa no tendría sentido. No será un consuelo decir que jugamos bien si no hemos ganado". Y añadió: "Yo me encargaré de que la Liga no quede sentenciada, aun si perdemos en el Bernabéu. Mi experiencia me dice que hay que seguir hasta el final".