Macario prefiere llamarse Mario
Una campaña publicitaria ayuda a los españoles a cambiar de nombre
¿Qué tiene que ver la venta de refrescos con el cambio de nombre de una persona? Así, a bote pronto, poca cosa. Pero la última campaña publicitaria de Aquarius consiste en ofrecer un servicio de gestoría a través de su página web para ayudar a los españoles que lo deseen a cambiar de identidad. De las 3.431 solicitudes recibidas, la empresa ha tramitado 242 en el Registro Civil.
La idea de esta acción publicitaria, diseñada por la agencia Sra. Rushmore, es que "nunca es tarde para cambiar aquello que no nos gusta de nuestra vida y continúa la línea".
Algunos de los cambios de nombre solicitados son Macario por Mario, Bonifacia por Boni, Cipriana por María, Felicísimo por Félix o Manuel por Alicia.
Las campañas de este refresco suelen apostar por historias reales. Por ejemplo, uno de los anuncios contó la historia de Eric Adjetey, un carpintero de Accra, capital de Ghana, que se dedica a construir ataúdes con formas que representan los sueños en vida de los difuntos, ya fuera un avión o un coche descapotable.
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