El Ararteko critica la escasa accesibilidad del sistema ferroviario
Un total de 813.645 personas, el 37,5% de las que viven en Euskadi, están consideradas ciudadanos de movilidad reducida -la mitad, de manera transitoria-, cifra que, según el último informe extraordinario del Ararteko, irá a más en la sociedad vasca, una de las más envejecidas del mundo. El ararteko, Iñigo Lamarca, presentó ayer el Diagnóstico de accesibilidad del sistema de transporte público de la Comunidad Autónoma Vasca, un estudio que entregó a la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga, y que deja patente que "queda mucho por hacer", según resumió, para que este colectivo no tenga problemas para acceder a esos servicios.
El transporte público con más dificultades es el ferroviario, considerado en el estudio como "prácticamente inaccesible". Tanto los andenes como el acceso a los propios vagones suman trabas para las personas con movilidad reducida. También "son inexistentes las medidas de accesibilidad en la comunicación en toda la red ferroviaria" para los discapacitados sensoriales. Euskotren tiene mejores niveles de accesibilidad que las instalaciones y los trenes de Adif y Feve, pero la situación general es "crítica".
En el otro lado de la balanza se encuentran el metro de Bilbao y los tranvías de Vitoria y la capital vizcaína, calificados como "referentes de la accesibilidad universal en el transporte público urbano". En ellos la parte negativa sigue siendo la accesibilidad para discapacitados sensoriales, personas con problemas de audición o de vista. El tranvía de Vitoria se halla en este sentido mejor adaptado.
En el transporte por carretera, el Defensor vasco ve en 2012 una oportunidad para hacer los servicios más accesibles. El próximo año deberán renovarse las concesiones de las líneas interurbanas, por lo que el Ararteko plantea una "programación y ejecución de planes de formación y sensibilización de los conductores sobre las necesidades especiales" de este colectivo. Y destaca las carencias de las estaciones de autobuses de San Sebastián y Vitoria. El 91% de los autobuses de Vizcaya que realizan un servicio interurbano están adaptados, pero en Álava ese porcentaje baja al 43%. En Guipúzcoa se sitúa en el 78%.
Entre las 18 recomendaciones del informe, se plantea mejorar la accesibilidad ferroviaria, la conexión entre aeropuertos y núcleos urbanos para personas con problemas de movilidad, la necesidad de incorporar taxis adaptados en los municipios donde no existen y la coordinación entre instituciones.
