_
_
_
_
Entrevista:JAVIER GUERRERO | Ex director general de Trabajo | Las ayudas de la Junta a empresas en crisis

"Los consejeros decidían las ayudas directas del fondo para empresas"

Javier Martín-Arroyo

Una declaración de Javier Guerrero ante la policía, en la que aludió a un "fondo de reptiles" en la Junta para ayudar a empresas en crisis (afirmación de la que luego se retractó), ha desatado una gran polvareda política. Guerrero fue director general de Trabajo de la Junta entre 1999 y 2008 y, previamente, alcalde de El Pedroso, localidad sevillana de la Sierra Norte. En su etapa en la Junta trabajó con tres consejeros: Guillermo Gutiérrez, José Antonio Viera y Antonio Fernández.

Pregunta. ¿Por qué utilizó la expresión fondo de reptiles?

Respuesta. La utilizo en el sentido de un fondo para empresas en apuros. ¿Cómo voy a decir que la Junta trabaja con dinero ilegal? El dinero está aprobado por el Parlamento, en presupuestos, auditado y fiscalizado.

"Los intrusos no son intrusos, son criaturas que están desempleadas"
"La CEA, sindicatos y alcaldes venían a pedirme ayudas a empresas"
"El control de las ayudas a posteriori lo hacíamos por contacto telefónico"
"Nadie puso pega alguna al dinero que dimos a los Ayuntamientos"
Más información
Empleo eleva a 70 las "situaciones discordantes" detectadas en los ERE
Las pensiones de los amigos de Guerrero

P. ¿Quién decidió crear el fondo de ayudas a empresas?

R. Cuando yo llego se estaban dando estas ayudas desde hacía 20 años. Hay un cambio del sistema como garantía, para que el dinero estuviera depositado. Y si había una aminoración presupuestaria, que esa partida no la sufriera. El sistema se consultó con [el bufete de abogados] Garrigues para reformular la partida con transparencia y garantía.

P. ¿Antes de 2001 cómo se concedían estas ayudas?

R. Cuando yo llegué se estaba ultimando el expediente de Cárnicas Molina. El dinero se daba a través de la Intervención de la consejería, y no sé por qué, después de pagar el 85% de las ayudas, el interventor se niega a firmar los últimos 150 millones [de pesetas] del ERE. No podíamos estar al pairo de los caprichos del interventor, cuando ya habíamos pagado casi todo el expediente. Se hicieron consultas con Garrigues, pero yo no participé en la fórmula.

P. La Junta le señala como el último responsable de todas las irregularidades. ¿Qué le parece?

R. Una burrada. He atendido todas las peticiones de ayudas laborales y se han hecho absolutamente con transparencia, sin intentar favorecer a nadie por razones ideológicas ni de amistad.

P. ¿Cómo explica los intrusos en los ERE?

R. Los intrusos no son intrusos, son criaturas necesitadas de ayuda sociolaboral que están desempleados. Estamos hablando de seis u ocho personas en diez años. Si teníamos diez empleados de una empresa y dos criaturas ajenas, me decían: 'Estudia la inclusión de los 12 en el mismo ERE'. Pero no es que pertenecieran a esa empresa. 'Las dos pólizas las metes en el mismo paquete y ya negociamos la forma de pago. Y así cobran también las criaturas desde el principio'. Distinto es el caso del fantasma que no ha cobrado y está cobrando otro. De eso yo no sabía nada y ni me imaginaba que estuviera pasando.

P. Pero hay más de seis u ocho casos de intrusos.

R. En Bonpunt hubo 12 personas que fueron despedidas tres meses antes del ERE de cierre y que vinieron de la mano de Comisiones Obreras. Me pidieron el mismo tratamiento para estos 12, que habían sido trabajadores de Bonpunt. ¿Esos son intrusos? Otro ejemplo: si Cash Lepe son tres empresitas y tengo que hacer una reestructuración, pues pondré juntos a los del supermercado y a los de la logística... ¿Los de logística son intrusos?

P. ¿Qué les parecía esta forma de actuar a los exconsejeros Viera y Fernández?

R. Nunca dijeron lo contrario. Nadie puso pegas a que una criatura solicitara lo mismo que los sindicatos o un colectivo.

P. ¿Conocían más altos cargos esta práctica?

R. No sé. Teníamos consejo de dirección y siempre he dado cuenta de lo que hacía como cualquier director general porque no había nada ilegal.

P. ¿Cada cuánto despachaba con los consejeros?

R. Como mínimo una vez al mes en el consejo de dirección, pero había casos muy fuertes que había que hablarlos. Por ejemplo Santana, Boliden y Faja Pirítica. Tenía que estar en comunicación fluida con el consejero porque eran temas de mucho dinero.

P. ¿Quién decidía las ayudas directas a empresas?

R. Yo no. Decidía el consejero. Delegados provinciales, otros consejeros y alcaldes proponían empresas para su territorio. Se miraban, se estudiaban y se concedían.

P. ¿Por qué no hubo un control a posteriori de las ayudas?

R. (Silencio prolongado) Siempre hubo interés por saber cómo funcionaba la empresa a través de contacto telefónico. Las ayudas que se han dado se han manejado bien.

P. ¿Existían informes previos de viabilidad?

R. Cuando viene un tío medio asfixiado no vas a pedirle que gaste más dinero en una memoria.

P. Pero si le está usted concediendo 600.000 euros...

R. Yo he visitado en persona casi todas las empresas que recibieron ayudas.

P. Hay empresarios que percibieron ayudas para mantener empleo y que tras recibir el dinero cerraron la empresa.

R. Esas ayudas no eran mías.

P. Pero hay expedientes con su firma y el mantenimiento de empleo como objetivo, que finalmente se incumplieron.

R. Claro, es fundamental. Desde la consejería lo que se quiere es que no se pierda empleo.

P. ¿Hubo descontrol?

R. Todos los sistemas son mejorables. Y si algo falla, se corrige. Posiblemente debió haber un control más exhaustivo.

P. ¿Cuántas solicitudes de ayuda se rechazaron?

R. Hubo una segunda propuesta de Dhul que se habló con Fernández y este dijo que no se daba más dinero.

P. ¿A cuántas empresas se les concedió ayudas?

R. A todas, menos a esa de Dhul.

P. ¿A todas?

R. Tampoco han sido tantas. La mayoría han sido ayudas para prejubilaciones. Había empresas que pedían ayudas sin lógica, pero eran la minoría.

P. ¿Qué papel ejercieron los sindicatos?

R. Tuvieron un papel super importante porque han sido los que más han utilizado este sistema, aunque ahora todo el mundo pegue el culo a la pared.

P. Matadero de Sierra Morena recibió nueve millones ¿No pensó que era demasiado dinero para una sola empresa?

R. (Suspira) Vamos a ver: sí. Ya está.

P. Esta empresa está impulsada por un exconcejal del PSOE...

R. José Enrique Rosendo [exedil de El Pedroso] había aglutinado un grupo de ganaderos. El proyecto no era político, con independencia del personaje. Era un proyecto de dinamización y Caballos [diputado del PSOE] respaldó el proyecto como director del Parque Natural Sierra Norte y logró el apoyo de todos los alcaldes de la zona.

P. ¿Confía en los exconsejeros Viera y Fernández?

R. No dudo de la honestidad de ninguno de los compañeros que he tenido. Ellos han tenido más interés o menos en función de la relación que tenían con las empresas, pero por beneficio, no.

P. ¿Por qué hay tantas empresas beneficiadas de la Sierra Norte de Sevilla?

R. En algún momento les tenía que tocar.

P. Pero la diferencia es abismal entre las ayudas a la Sierra Norte o Almería...

R. Vaya ahora a ver Almería, seguro que están dando más.

P. ¿Tenían los empresarios algún vínculo político?

R. Nunca preguntamos a nadie de dónde era. Mala administración seríamos. David Antequera, del círculo de Beltrán Pérez (edil del PP de Sevilla), trabajaba en Bellow Marko y me pidió que le echara una mano. Juan María González Márquez (hermano del ex presidente Felipe González y ex apoderado de Bellow Marko) nunca me pidió nada.

P. ¿Qué otra gente le pidió ayudas?

R. Nunca he sabido qué empresas había detrás del que pedía. La CEA me ha pedido que ayudara a ciertas empresas y los sindicatos, alcaldes... una panoplia muy amplia y cada uno venía a solucionar su problema.

P. ¿Qué relación tenía Empleo con Ruiz Mateos?

R. Le ayudamos solo en el ERE de Dhul. La negociación yanos vino hecha entre la empresa y los sindicatos. Quien intervino en el acuerdo fue Juan Lanzas.

P. En la contabilidad general de las ayudas, hay conceptos de pago que indican "facturas varias" y "facturas diversas". ¿A qué se refieren?

R. Pueden ser facturas al despacho de Garrigues por la negociación de Santana, porque esos asesoramientos había que pagarlos, aunque yo no los contrataba.

P. ¿Quién los contrataba?

R. El consejero, pero me los cargaban a mí departamento.

P. ¿Por qué se meten Ayuntamientos y fundaciones en un fondo para empresas en crisis?

R. Con ese fondo, aparte de empresas en crisis, también ayudamos a generar empleo. Dimos dinero a los Ayuntamientos para las ferias de muestras, para la promoción de artesanos y empresarios. Entendíamos que no era malo y nadie puso nunca ninguna pega.

P. El 90% de los Ayuntamientos son de Sevilla.

R. Sí, los que las pedían.

P. Pero nadie informó del fondo a los Ayuntamientos de otras provincias.

R. O sí... (silencio)

P. ¿Se arrepiente de su amistad con Lanzas [exsindicalista de UGT e intermediario en varios ERE]?

R. No me tengo que arrepentir de la amistad. Con independencia de lo que externamente haga, siempre llegó a mi despacho representando a trabajadores o a empresarios. Siempre intentó llegar a un consenso para que las cosas tuvieran solución.

P. ¿Qué le diría hoy a Lanzas?

R. Con todos mis respetos, me da pena. Creo que la ambición le ha vencido.

P. ¿Usted nunca estuvo al tanto de las irregularidades?

R. Nunca.

P. ¿En qué consistían los pagos cruzados?

R. De la tesorería general de la Junta salía todos los meses el dinero al IFA. O sea, en el presupuesto dice "partida presupuestaria para transferir al IFA". Yo miraba los compromisos de pago que me urgían y le mandaba un escrito al IFA diciendo "con cargo a la partida 31L, ruego se pague tanto a este grupo y tanto a este, y tanto a este". Con lo cual se postergaban pagos. Siempre tapando agujeros. Yo explicaba las prioridades al IFA.

P. El PSOE le ha expulsado por las irregularidades.

R. Sé que estos procesos no son agradables. Estoy indignado porque hemos trabajado mucho y bien. En la Junta no tienen ni idea de lo que están hablando y el partido, en un momento, se alarmó, pero creo que después ha reflexionado. Un tío no está nueve años en una Dirección General de Trabajo porque es un chufla.

P. ¿Cómo reaccionaron en Empleo cuando en 2005 llegaron los informes negativos de la Intervención sobre el procedimiento de las ayudas?

R. Los informes no me acuerdo cómo eran porque le llegan al consejero. Pero no eran vinculantes y en base a esa advertencia se hicieron unos borradores de decreto, que nos tiraron para atrás. Se hicieron entonces borradores de órdenes y también nos los tiraron para atrás y no dejaron ninguno. Por eso seguimos con el mismo sistema.

Javier Guerrero, ex director general de Trabajo, en una foto de archivo.
Javier Guerrero, ex director general de Trabajo, en una foto de archivo.GARCÍA CORDERO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Javier Martín-Arroyo
Es redactor especializado en temas sociales (medio ambiente, educación y sanidad). Comenzó en EL PAÍS en 2006 como corresponsal en Marbella y Granada, y más tarde en Sevilla cubrió información de tribunales. Antes trabajó en Cadena Ser y en la promoción cinematográfica. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla y máster de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_