La vacuna contra la lengua azul será voluntaria

La vacuna contra la enfermedad de la lengua azul, que afecta a la cabaña ganadera vacuna y ovina del país, dejará de ser obligatoria. Las oficinas agrarias de la Xunta solo la suministrarán, de manera gratuita, a los propietarios de animales que lo soliciten. El Sindicato Labrego Galego (SLG) celebró ayer el fin de la obligatoriedad de la medida ya que, en opinión del responsable del sector ganadero de la central, Adolfo Cabarcos Saavedra, la vacuna causaba más prejuicios que beneficios al ganado.

La enfermedad de la engua azul apareció en territorio gallego hacia mediados de 2008. Lo hizo, según la hipótesis más plausible, en unas vacas importadas de Alemania en A Mariña. En septiembre de ese año, el Gobierno autónomo prescribió, sin posibilidad de optar, la vacuna a la cabaña ganadera: vacas, ovejas y cabras. "Empezaron a aparecer reacciones extrañas a las vacunas", relató ayer Cabarcos, "la mortandad en las ovejas sube, crece el número de abortos, surgen cojeras, esterilidad, baja la producción láctea en las vacas...". El Sindicato Labrego inició entonces una campaña contra la vacuna de la lengua azul que lo llevó también a una plataforma con asociaciones en defensa de los ganaderos de toda España e incluso franceses.

"Peor que las 'vacas locas"

"Las pérdidas para el ganadero fueron mayores por la vacuna que por la propia enfermedad", no dudó en afirmar el propio sindicalista, quien recordó, además, que en la denominada crisis de las vacas locas, los estragos en la cabaña fueron cuantitativamente menores que con la lengua azul.

Adolfo Cabarcos repasó las actuaciones de su central al respecto y mencionó varias reuniones con cargos de la Consellería de Medio Rural. Finalmente, el departamento de Samuel Juárez accedió a las demandas de los sindicalistas del campo. La vacuna contra el serotipo 8 de la enfermedad dejó de ser obligatoria el pasado 30 de diciembre. La del serotipo 1, el otro activo entre los animales de la comunidad, lo hará el 30 de junio.

"Era mayor la pérdida vacunando masivamente al ganado", ahondó Carmen Freire, líder del SLG, "que tratando con medicina veterinaria cada caso de enfermedad". "Dentro de un año veremos cuánta gente solicita la vacuna; yo no conozco a nadie que vaya a hacerlo", concluyó Cabarcos.