Ripoll justifica al Consell pero cita al consorcio por la basura de Castellón

Una de cal y otra de arena. José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación de Alicante, del PP, volvió ayer a nadar en la ambigüedad a la hora de valorar la inminente llegada de basura desde el norte de Castellón al vertedero de Piedra Negra, en el término de Xixona. El también líder provincial del PP señaló que atenderá la demanda del alcalde de Xixona, Ferran Verdú, del PSPV, de convocar un pleno extraordinario del consorcio de residuos sólidos de la zona XIV, pero a renglón seguido justificó la decisión del Consell: "La cantidad de basura que llegará de Castellón a Xixona es una cifra razonable, que nada tiene que ver con las 50.000 toneladas que han anunciado los socialistas". El consorcio de ese plan zonal está presidido por el propio Ripoll.

El Consell achaca a la proximidad de las elecciones las críticas socialistas

Alarte califica de "vergonzosa" la situación de la gestión de residuos

Ripoll reiteró que la posición de la Diputación no ha variado desde el pleno de la corporación provincial que aprobó una moción conjunta del PP y PSPV contraria a la llegada de basura de Castellón a Alicante. "Entonces pedimos el Consell que buscara soluciones alternativas, y nos mantenemos en esa postura", explicó. "Es el Consell el que tiene que aportar esas alternativas, porque la competencia es suya", reiteró. El titular de la Diputación negó que haya desatendido el clamor del Ayuntamiento de Xixona y los vecinos de la población contra la llegada de la basura de Castellón. "El Ayuntamiento de Xixona nunca se ha sentido solo", aseveró.

Pese a estas declaraciones, ayer el Ayuntamiento de Xixona no había recibido información alguna ni de Ripoll ni de ningún responsable político del Gobierno valenciano tras reclamar el martes explicaciones ante la inminente llegada de basura del norte de Castellón a la planta de tratamiento que se ubica en su término municipal y que gestiona la empresa pública Vaersa.

En una línea similar a Ripoll se pronunció el consejero de Medio Ambiente, Juan Cotino, que minimizó el envío de basura y pidió no exagerar las cosas ya que, dijo, "se está hablando de 150 camiones". Durante un acto en Benicàssim, Cotino atribuyó el revuelo político que el envío de basura ha provocado a la proximidad de la campaña electoral y recordó que la llegada de residuos a Xixona es una decisión "provisional" mientras se termina la planta de tratamiento de Cervera del Maestrat.

Los socialistas salieron en tromba a criticar la política de gestión de residuos del Consell y también exigieron la dimisión de Cotino.

El secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, tildó de "vergonzosa", durante una visita a la Universidad de Alicante, la situación de la gestión de residuos en la Comunidad Valenciana, que se está haciendo de "manera nefasta e irresponsable".

El líder del PSPV también dejó caer que la mayoría de consorcios están aplazando el incremento de tarifas a que pasen las elecciones municipales. "Me parece vergonzosa la situación, las basuras de Camps son diversas, de muchos colores y tonalidades, pero las basuras de la ciudadanía que está gestionando Camps las está gestionando desde la irresponsabilidad", resumió Alarte quien recordó que en la Comunidad Valenciana se "lleva más de década y media sin cumplirse el plan zonal, sin construir los equipamientos e infraestructuras innecesarias".

Los socialistas incidieron en la "catastrófica situación" que el Consell ha causado en materia de residuos. Así, el portavoz de Medio Ambiente del Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes Valencianas, Adolf Sanmartín, exigió la dimisión del consejero de Medio Ambiente por "provocar que la basura se esparza por toda la Comunidad Valenciana sin que haya aprovechado sus competencias" para remediar la situación. Sanmartín recordó que 13 años después de aprobarse el primer plan de residuos siguen sin cumplirse sus objetivos: "Cada vez se produce más basura -de los 438 kilos por habitante y año de 1996 se ha pasado a 500 kilos en 2008- y se recicla muy poco". En 2009, de los 2,8 millones de toneladas de residuos urbanos gestionados en la Comunidad, las plantas de tratamiento reciclaron no llegó a un 9%, según citó con datos oficiales de Medio Ambiente.

A las críticas socialistas se sumó la secretaria general del PSPV alicantino, Ana Barceló.

Por otro lado, Esquerra Republicana anunció una moción en el próximo pleno del Ayuntamiento de Xixona contra "la entrada masiva de basura", para exigir datos a Medio Ambiente e instar a la Generalitat a una reunión "urgente para abordar el problema".