Técnicos de Sanidad apuntan que Elorriaga ordenaba inspecciones

La comisión parlamentaria que busca esclarecer las responsabilidades políticas del caso Margüello, las presuntas irregularidades en la contratación de servicios sanitarios entre 1996 y 2009, recibió ayer a dos inspectores de Sanidad en Vizcaya, Patxi Cirarda y Alejandro Ruiz. Ambos técnicos acudieron a explicar por qué no se realizó ninguna inspección a la empresa Gestión de Servicios Sanitarios XXI, vinculada al ex jefe de Calidad del Hospital de Cruces, José Carlos Margüello, como paso previo indispensable para lograr una autorización que le permitiera contratar con la sanidad pública.

En una comparecencia inusualmente larga, uno de ellos aseguró que si el director territorial de Sanidad en Vizcaya, por aquel entonces, en 2006, José Ramón Elorriaga, no daba la orden, no se realizaban las inspecciones. La autorización se concedió el mismo día de su solicitud y sin las inspecciones necesarias. Por todo ello, fue declarada nula por la Comisión Jurídica Asesora y ha llegado a los tribunales por un presunto delito de prevaricación (dictar una resolución injusta a sabiendas). Uno de ellos reconoció que ya en 2006 esta autorización causó revuelo en la dirección territorial. Los diversos informes reconocen que hubo dudas en el proceder con esta empresa, ya que en sí no prestaba servicios sanitarios y era una mera entidad intermediaria que derivaba a otros centros la atención.

La autorización abrió la puerta, en junio de 2006, a que ese mismo mes Sanidad contratara con la empresa, que recibió dos millones de euros por un contrato tramitado por el procedimiento de emergencia y, más tarde, otro de cinco millones junto con la Clínica Indautxu y Rehabilidom. El Tribunal de Cuentas identifica que en ambos casos hubo deficiencias económicas: en el primero, se duplicó la tarifa máxima de rehabilitación, y en el segundo se realizaron pagos por encima de lo establecido en 175.000 euros.