_
_
_
_
_
Reportaje:

Hamlet entona unas jotas

La compañía Titania representa una versión cómica del clásico shakespeariano en el teatro Casa de Vacas de El Retiro

"¡Ay, Jamletico!", exclama una doliente reina Gertrudis mientras su hijo le reprocha, a son de jota y ataviado con una peluca fucsia y una nariz de clown, su veloz matrimonio con su tío Claudio tras la muerte de su, respectivamente, padre, hermano y esposo. La carcajada de los asistentes ayer al ensayo de Jamlet (con jota), la versión libre de la tragedia de Shakespeare que hasta el 19 de septiembre se representa en el teatro Casa de Vacas, pudo oírse en todo el parque de El Retiro. Responsable de semejante atrevimiento es la compañía Titania Producciones, que ya ha versionado en el pasado otros textos del bardo de Stratford-upon-Avon en Romeo y Julita o cuando es que no es que no y en el Sueño de una noche de verano y perejil. Ambas adaptaciones salieron de la pluma de Rosa Valentina Sáez y Ana Lucía Pardo, productoras y actrices de Titania. Jamlet (con jota) se estrenó el pasado otoño en este mismo escenario madrileño y recientemente se representó en el Festival Internacional de Teatro San Javier.

"Contamos fielmente la tragedia, las intrigas...", dice el director de la obra

"Los grandes autores ofrecen la oportunidad de reinventarlos", explica Sáez, autora -esta vez en solitario- de la adaptación de Hamlet e intérprete de Ofelia. Titania es una compañía de clowns y provocar la risa es su obligación. Pero sin desvirtuar la intención de la obra: "La idea es sacar lo más esencial de la historia y de cada personaje y respetarlo. En este caso, incluso, he introducido fragmentos del original, como el ser o no ser o frases de Ofelia. A partir de ahí, me he concedido licencias hasta donde me ha llegado la imaginación", añade la autora. Sin ir más lejos, Sáez, aragonesa como el resto de los actores de Titania, decidió incorporar el folclore aragonés a la trama. La historia sucede en Aragonia y uno de los monólogos más famosos de la historia del teatro se convierte, en esta obra, en una "jota de estilo". Así lo define Jorge Gregorio, actor y especialista en cantos y danzas aragoneses: "El duelo final entre Jamlet y el rey empieza con una jota de picadillo y acaba en un paloteado", explica.

Para dirigir este insólito Hamlet, Sáez recurrió a Joshean Mauleón, que participó como clown en las recientes giras asiática y americana de Quidam, uno de los espectáculos del Circo del Sol. "Esta obra se adapta muy bien a un escenario exterior como el de Casa de Vacas y a todo tipo de público", asegura, mientras hace hincapié en que la historia de Hamlet encaja perfectamente con la naturaleza del clown: "Contamos fielmente la historia, la tragedia, las intrigas... Al clown le encanta hacer dramas, morirse, resucitar...".

Pepe India, el atribulado protagonista, reconoce que interpretar a Jamlet le permite atreverse con uno de los personajes más decisivos de la escena sin la trascendencia que tendría encarnar al auténtico Hamlet: "En Inglaterra, si lo haces mal, puedes arruinar tu carrera como actor", señala. "La obra es muy divertida y aquí se puede jugar. El propio personaje juega a ser un loco. Pero luego tiene una parte existencial, filosófica, que también queremos transmitir, con sus momentos oscuros, porque no deja de ser una obra de asesinatos, incestos y traiciones".

Jamlet (con jota). Terraza del teatro Casa de Vacas del parque de El Retiro. Hasta el 19 de septiembre, a las 22.00. La entrada (12 euros), incluye un refresco.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_