'Furia roja' tras las vitrinas

Marcaba el calendario 2 de enero de 1903 y el que hoy es el deporte rey en este país carecía hasta de nombre en castellano. "No había presenciado don Alfonso XIII ningún partido de football, el juego inglés de reciente importación en España, y con objeto de dárselo a conocer organizó la federación de clubes de football de Madrid un match, que se verificó el día 23 en el hipódromo", rezaba en esa fecha la entradilla de un artículo del diario Alrededor del Mundo. Por no existir, no existía ni la selección española, que se fundaría 17 años más tarde con motivo de los juegos olímpicos de Amberes (Bélgica). Pero un siglo largo ha sido suficiente para dejar claro que a los españoles les gusta el fútbol y, más aún, cuando lo juega su selección. Por eso, desde ayer, la Roja ya puede presumir de ser digna de tener hasta su propio museo.

Historia, deporte y 'art déco' se dan cita en este homenaje al balompié nacional

La exposición inaugurada ayer no se abrirá al público hasta septiembre

Luis Suárez, Ramallets, Andoni Zubizarreta, Pirri, Raúl, Zarra, Gaínza, El Buitre... La Fundación de la Federación de Fútbol (RFEF) expone en esta exposición permanente ubicada en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas cientos de artículos que los grandes hitos del equipo español han usado en sus contiendas internacionales: zapatillas, camisetas, balones, trofeos... Un verdadero viaje por la historia de nuestro fútbol que ayer el príncipe Felipe daba por inaugurado en compañía de los jugadores convocados por Vicente del Bosque, que se concentran estos días en el recinto madrileño. Aunque la apertura fue de mentirijillas. En realidad, la plebe no podrá acceder a verlo hasta septiembre, "pero digamos que la presencia de la selección y la cita con la Casa del Rey han obligado a adelantar un poco los acontecimientos", reconoce un portavoz de la Federación. El futuro monarca aprovechó la ocasión para insuflar aliento a los jugadores para el próximo Mundial de Sudáfrica y reconoció "su calidad, su esfuerzo y sus ganas de victoria".

"Es muy bonito. Tiene de todo. Seguro que se convierte en el segundo destino de referencia en Madrid para los turistas chinos. Después del Bernabéu, claro", considera Yu Fu, una joven periodista oriental que cuando vino a España buscó una casa en Móstoles "porque de allí era Iker Casillas".

Pablo Ornaque, coleccionista y recuperador de piezas simbólicas, es el creador de este espacio modernista y transgresor que incluye desde artículos deportivos hasta el coche que utilizaba Alfredo di Stéfano durante su breve aventura como actor. Entre las vitrinas el visitante se cruza de todo: elementos lúdicos, como futbolines de diferentes épocas, pantallas interactivas o videoconsolas; otros sobrecogedores, como un paritorio con un gran balón que parece representar el nacimiento de este deporte, o monumentales como las cariátides traídas de Amberes que ambientan el espacio con el estilo art déco de los años veinte, época en la que la selección se estrenaba en los Países Bajos con el seudónimo popular de la furia española, rememorando el histórico saqueo de la ciudad anfitriona por parte de los combatientes patrios en el siglo XVI.

Y el Príncipe, tras reconocer que el museo le había trasladado a otras épocas vividas, deseó: "Esperamos [que esta inaugu-ración] se rubrique este año como una grandísima noticia". Y los jugadores de la Roja, tomaron nota.