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Reportaje:

El enigma de la portería de Casillas

Los técnicos analizan la defensa del Madrid, que no encajaba tan pocos goles desde 1997

Diego Torres

Cuando juega el Madrid, el lugar más apacible del campo suele ser la portería que defiende Iker Casillas. Lo mismo da que sea en el Bernabéu o lejos de Chamartín. En la última salida, en El Sardinero, recibió dos tiros entre los tres palos. Fue una experiencia relajante para el portero, que lleva tres cuartos de temporada insólitos. El tiempo que transcurre mirando al horizonte sin advertir amenazas le ha permitido a Casillas reflexionar sobre la naturaleza del equipo para el que juega. Ayer lo explicó como quien se confiesa: "Para Pellegrini lo primero es mantener la portería a cero".

Este Madrid que en julio, durante la ola de presentaciones, prometía lanzarse al ataque con Kaká, Benzema, Cristiano, Robben, Higuaín y Raúl, recibirá al Barça el sábado convertido en un muro infranqueable. La mano del entrenador, ante todo, se nota en la disposición defensiva. Esto le ha permitido al Madrid recibir 0,8 goles por partido en la Liga. Una media que no se repetía desde la temporada 1996-97, cuando Fabio Capello era el técnico.

"Aparte del Barça, no tiene rival. Si los atacas te agujerean", dice Juanma Lillo.
"Para Pellegrini lo primero es mantener la portería a cero", explica el portero
"A veces parece un equipo menor", apunta Manzano; "incluso jugó con Lass por la derecha"

"Esto se explica sobre todo por el compañerismo", dijo ayer Casillas. "La gente está más comprometida. Este año nos hemos comprometido a guardar la parte de atrás. A Pellegrini le gusta mantener la portería a cero, sabiendo que si no nos marcan, con los jugadores que tenemos arriba, y con su calidad, alguna ocasión vas a tener y la vas a materializar. Así es difícil que se nos escapen los tres puntos".

Juande Ramos llegó a una conclusión parecida hace un año, cuando ocupó la caseta del Bernabéu. Entonces la propuesta no soportó el contraste con el Barça. El enigma de esta temporada, la gran incógnita, se resolverá cuando el Madrid de Pellegrini se mida al Barcelona. El técnico del Mallorca, Gregorio Manzano, observa el fenómeno con curiosidad. "El sábado", dice Manzano; "vamos a asistir al examen definitivo para saber si estos números se deben a cualidades del Madrid o a la falta de competencia que tiene en la Liga. Por ahora, es incierto que el Madrid defienda especialmente bien. Todavía yo no estoy seguro. Los equipos fuertes, el Sevilla, el Milan, el Lyon, y el Atlético, le han creado muchos problemas. El Barça nos sacará de dudas".

Manolo Preciado, el entrenador del Sporting, visitó el Bernabéu hace un mes. Ayer ponderó las palabras de Casillas: "En los últimos ocho años el mejor jugador del Madrid ha sido Iker Casillas. Esto no es ni medio bueno para un equipo como el Madrid. Era como jugar a la ruleta rusa. Creo que la llegada de Pepe en 2008, y ahora los fichajes de Albiol, Arbeloa, Garay, y, sobre todo, Xabi Alonso, han mejorado mucho al Madrid en defensa. Es el punto de partida de cualquier deporte de equipo. Lo primero es fortalecerse atrás. Además, sin jugadores de banda, Pellegrini no tiene plantilla para hacer mucho más de lo que hace".

La diferencia no se nota tanto en los remates que recibe Casillas como en la claridad conque le llegan los rematadores. En la temporada 2002-03, por ejemplo, el Madrid recibió una media de cinco tiros por jornada. Ahora le tiran menos de cuatro, pero normalmente los balones van centrados, o flojos.

La semana que viene el Madrid visitará Almería. Allí lo espera el equipo que dirige Juanma Lillo. Lillo analiza el éxito defensivo del Madrid a partir de su poder rematador, y de la escasa entidad de los adversarios que se encuentra en la Liga. "Creo que cometemos un error al fracturar defensa y ataque. El fútbol es una unidad funcional. El Barça se defiende conquistando la pelota. Yo no creo en construcciones defensivas al margen de la posesión. Tú eres lo que eres capaz de hacer con el balón. Yo creo que el Madrid no tiene rivales en la Liga, aparte del Barcelona. La gente ni se atreve a rematarle. Las estadísticas de los dos primeros de la Liga significan que, desde hace dos años, en el fútbol español ha empezado un mundo nuevo. Las diferencias son insalvables. Es muy difícil llegarle al Madrid porque tiene una pegada descomunal. Anímicamente te destroza. Si los atacas te hacen un agujero. Higuaín, Ronaldo... O Guti, que se las da: 'Toma, ahí tienes para hacerles el agujero'. ¡Es que los contrarios ni les tiran córners! El Madrid juega a golear. El Barça te golea mientras juega".

"La Liga ha pegado un cambio terrible", explica Lillo, melancólico. "¿Cómo vas a retener a Villa o Silva si los quieren fichar unos equipos que le sacan 20 puntos al Valencia, que es el tercero? Los rivales del Madrid y el Barça nos hemos convertido en sus proveedores de jugadores".

Manzano cree que las palabras de Casillas reflejan la predisposición conservadora de Pellegrini, muy condicionado tácticamente por la falta de mediocampistas y extremos. "Las alineaciones de Pellegrini hablan de una idea básica de equilibrio defensivo", dice el entrenador del Mallorca. "A veces el Madrid actúa como un equipo menor. Primero juega a mantener la portería a cero. ¡Incluso hemos visto a Lass jugando en la banda derecha! El partido contra el Alcorcón en la Copa marcó un punto de inflexión: a partir de ahí Pellegrini no se apartó del doble pivote. Sin Robben, que se fue al Bayern, Pellegrini ha usado las bandas con los laterales. El Madrid siempre parte desde el equilibrio defensivo, no desde la posesión del balón".

Casillas, durante un partido de Liga.
Casillas, durante un partido de Liga.CLAUDIO ÁLVAREZ

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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