La Comunidad de Madrid y Getafe negocian impulsar el proyecto de La Carpetania

La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Getafe comienzan a aproximar posiciones acerca de La Carpetania, el proyecto de un parque empresarial con 25.000 puestos de trabajo que parecía a punto de naufragar por discrepancias entre las dos administraciones.

En una reunión mantenida ayer, el consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad, Antonio Beteta, y el alcalde de Getafe, el socialista Pedro Castro, acordaron reevaluar la situación. Esto equivale a un regreso al proyecto al que se había dado carpetazo hace unas semanas, renunciando al suelo en que se iba a edificar la segunda fase del parque.

La prioridad para la Comunidad de Madrid es salvar los pactos con la empresa aeronáutica EADS-CASA. Un acuerdo que une a la multinacional con el Imade (Instituto Madrileño de Desarrollo) y el Ayuntamiento de Getafe, establece que los trámites para la urbanización de los 400.000 metros cuadrados del parque tienen que estar solucionados en un año. De no ser así, la empresa ya declaró a este periódico que "estudiará otras posibilidades". En el caso de que EADS renuncie a los terrenos, el futuro de La Carpetania quedará comprometido porque ninguna de las industrias asociadas a la multinacional iría a Getafe.

El Ayuntamiento y la Comunidad presentarán antes de octubre unos informes que, además de estudiar la posición de EADS, replantearán los problemas técnicos y económicos que supone la adquisición de los casi cuatro millones de metros cuadrados sobre los que edificar el parque.

La ruptura de la colaboración entre las administraciones obedeció a divergencias en torno al sistema para obtener los terrenos. El Ayuntamiento apostaba por la expropiación, la vía prevista desde que el proyecto echó a andar en 1999; mientras, la Comunidad quería negociar con los propietarios un sistema de cooperación o compensación. El Ayuntamiento argumenta que la expropiación resultaría 300 millones de euros más cara de lo previsto (843 millones en total), pero sería el único sistema lo suficientemente rápido para no incumplir los acuerdos con EADS.

El clima ha cambiado. Pedro Castro definió la actitud del consejero Beteta como "absolutamente positiva". La primera fase de La Carpetania se terminó en 2006 y emplea a 8.000 personas.