"Mi ambición pasa por jugar"

Mino Raiola, agente de futbolistas, se retorcía en el asiento, inquieto por cómo se sucedía la rueda de prensa. Pero a Maxwell Sherrer Cabelino (Brasil; 1981) poco le importaba. Estaba radiante; era su día, su presentación en sociedad como jugador del Barça, por más que las sucesivas preguntas se refirieran a Zlatan Ibrahimovic [ariete del Inter] y su posible traspaso al club azulgrana. Incluso se relajó Mino Raiola, que, casualmente, representa a los dos jugadores. "Es un trozo de pan, una bellísima persona", le define Toni Bruins Slot, ayudante de Johan Cruyff en el Barça y de Ronald Koeman en el Ajax, cuando Maxwell defendía los colores ajaccied. Como lateral izquierdo, tampoco lo hace nada mal.

Maxwell, que ha costado 4,5 millones de euros, ha firmado un contrato por cuatro años con opción a un quinto y tendrá una cláusula de 50 millones. En teoría, estará a la sombra de Abidal. "Sé que llego para sustituir a Sylvinho. Pero ningún jugador se contenta con la suplencia porque todos tenemos ambición de jugar", advirtió el brasileño.

Tanto para el cuerpo técnico como para la secretaría técnica, lo primordial de los fichajes de este curso es que garanticen la competitividad. "Queremos mantener la motivación del equipo, que ha hecho la mejor temporada de la historia del club", manifestó Laporta. Txiki Begiristain, director deportivo azulgrana, aprecia la competitividad de buenas a primeras. "Maxwell es un brasileño que ha crecido en Europa, ha aprendido el fútbol del Ajax y ha ganado experiencia en Italia. Tiene buen físico y calidad técnica", apuntó. Recogió el testigo el defensa. "Pasar por Holanda es una ventaja porque el fútbol es muy parecido al de la Liga. Y me pongo a disposición para integrarme lo antes posible", zanjó.