De la Iglesia dirigirá la política para Iberoamérica

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, quiso dejar claro ayer que nadie le ha nombrado a su nuevo alto cargo. Por eso, él mismo anunció que Juan Pablo de la Iglesia (Madrid, 1948) será el secretario de Estado para Iberoamérica en sustitución de la flamante ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. Y lo hizo en la toma de posesión de la directora de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Elena Madrazo. El puesto que ocupaba De la Iglesia hasta el pasado 27 de marzo.

Podía parecer una jugada a dos bandas minuciosamente planeada. Pero no lo era. Cuando la secretaria de Estado de Cooperación, Soraya Rodríguez, decidió prescindir de De la Iglesia, Trinidad Jiménez no se imaginaba que sería ministra. Simplemente, según fuentes diplomáticas, Rodríguez no se entendió con De la Iglesia y quiso tener a una persona de su confianza al frente del más potente instrumento con que cuenta la cooperación española.

Por eso, el ascenso de De la Iglesia podía frustrarse por temor a que se interpretara como un desaire a Soraya Rodríguez. Al final, no fue así. Moratinos apostó para promocionar a un miembro de la carrera -los diplomáticos llevaban muy mal que tres de los cuatro secretarios de Estado fuesen hasta ahora políticos- y así lo recomendó también Jiménez. Contó con el poderoso respaldo de la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, a cuyas órdenes trabajó durante cuatro años como director de la AECID. El resto lo hizo su currículo: embajador en México, Guatemala y Polonia, y director general para Iberoamérica, entre otros destinos.