Cae en una redada el 'capo' del narcotráfico en Galicia
Vázquez Roma era un marinero más en su barrio
El Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) se ha anotado uno de los mayores éxitos en la lucha contra el narcotráfico al detener a Ramiro Vázquez Roma, de 42 años, natural de Cambados (Pontevedra) y considerado el número uno del tráfico de cocaína en Galicia. Sin antecedentes penales, pero con una amplísima ficha policial, Vázquez Roma dirigía una potente organización de la que formaban parte algunos familiares que han huido a Portugal, donde el escurridizo personaje tiene intereses económicos.
Entre sus socios figuran conocidos empresarios de Arousa que fueron detenidos en otras operaciones antidroga, entre ellos, un industrial de Cambados y un comerciante que había operado con otras organizaciones y que hacía los contactos con los carteles colombianos para organizar los envíos de cocaína desde Suramérica.
En el barrio de Santo Tomé (Cambados, Pontevedra), donde residía, Ramiro Vázquez era un marinero más hasta que decidió dedicarse al narcotráfico y montar un astillero en Portugal, cerca de Viana do Castelo, donde construía lanchas más rápidas y ligeras que las tradicionales planeadoras.
Su vida tiene paralelismos con su convecino de barrio José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, otro peso pesado que dio el salto al narcotráfico a finales de los ochenta y que sigue encarcelado. Ambos emergieron de la pesca y el marisqueo y formaron su propia red para operar en el lucrativo negocio de los estupefacientes. También Miñanco construía sus propias lanchas.
Vázquez Roma fue detenido el pasado lunes por agentes de Aduanas tras la captura, horas antes, de un alijo que formaba parte de un cargamento estimado en cuatro toneladas de cocaína. A la espera de que se realice el pesaje definitivo de los más 100 fardos apresados en dos planeadoras y en el mar, la droga retirada del mercado supera los 3.000 kilogramos.
Aduanas llevó con absoluta discreción el arresto de Ramiro Vázquez y también de su mujer, Dolores Millán, así como el registro de su domicilio en el barrio marinero donde residían con dos de sus hijos de corta edad. En total, fueron detenidas siete personas en tierra, después de que los tripulantes de las dos planeadoras fueran sorprendidas en plena navegación.
La operación confirma que los narcotraficantes vuelven a usar las rías de Pontevedra y Arousa para acercar sus planeadoras a la costa.
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