La Liga suena a tango

Repuntan el Barça y el Valencia, golea el Atlético, el Athletic gana en Levante, el Valladolid descuenta los dos primeros puntos al Madrid y desfallece el Sevilla. Las malas noticias se acumulan de forma imprevista en la sede del mejor club del mundo, como proclama Del Nido, después de la desgarradora muerte de Puerta. Escaldado en Londres, el equipo de Juande Ramos salió también muy mal parado de Barcelona. Extrañamente conformista, perdió vitalidad en el Camp Nou, de manera que especuló con el marcador hasta que Messi le mandó a la lona con un terrible gancho de izquierda.

Ausente Eto'o y desaparecido Ronaldinho, superado por las circunstancias y por el juego, el pequeño diablo argentino se ha convertido en el faro de un equipo menos bonito y a cambio más serio y competitivo. Milito, Abidal y Touré han endurecido el grupo azulgrana, Giovani y Bojan lo refrescan cuando el partido ya ha madurado con Iniesta, y Messi firma los goles de la victoria. La pulga ha acabado con el debate de los fantásticos y en el estadio barcelonista se vuelve a hablar de fútbol más que de circo.

Messi aúpa al Barcelona, Agüero revaloriza al Atlético, Aimar embellece al Zaragoza, Joaquín abate al Betis, Rossi firma las victorias del Villarreal y Saviola mantuvo invicto al Madrid, líder en solitario, en un partido muy abierto. Fue una jornada de futbolistas con buen gusto, capaces de desequilibrar cualquier partido, siempre protagonistas porque son exigidos. El campeonato pinta más disputado que nunca, y los equipos precisarán de sus figuras mediáticas. Traspasado Torres, el Atlético lleva la firma de Agüero, un delantero exquisito, con grandes gestos técnicos, detalles más propios de un brasileño. Aimar es del mismo país que Agüero y Messi. Ocurre que no tiene continuidad, y se asoma y se esconde de manera alternativa. Y queda Saviola, otro argentino, que ayer empató a última hora para el Madrid en Valladolid después de una contienda sin apenas respiro, en la que se vio un gol de bandera, firmado por Pedro López.

El tango se apoderó ayer definitivamente de la Liga, coronada, por lo demás, por el gol de Joaquín en Valencia después de una jugada que mereció la ovación de la hinchada verdiblanca, huérfana de jugadores como el ex bético.