Las víctimas ven "avances" en el proyecto de ley pero desconfían del Gobierno
Covite y la AVT, las dos principales asociaciones de víctimas del terrorismo, consideran que el borrador del proyecto de ley de ayuda a este colectivo que prepara el Gobierno vasco incorpora mejoras, sobre todo en el aspecto material, pero expresan, con distintos matices, su desconfianza sobre el compromiso real del tripartito con los afectados por la violencia política. Las alegaciones presentadas por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) del País Vasco son netamente más ponderadas que las de la AVT. Esta se negó a acudir la reunión celebrada en Vitoria hace un mes, en la que el Gobierno presentó el borrador, pero se le envió.
En su respuesta, la AVT afirma que varios puntos del mismo son "indignantes" y pone una condición "imprescindible" para tomar en consideración el anteproyecto: la inclusión de un artículo que comprometa al Gobierno a "no ayudar más, directa o indirectamente, a los colectivos y personas que tengan la más mínima relación con ETA y su entorno". Se refiere, sobre todo, a las subvenciones establecidas por el Departamento de Justicia para que las familias de presos de ETA puedan visitarlos en las cárceles de fuera de Euskadi.
Por su parte, Covite estima que el borrador supone "un avance correcto" respecto a la situación precedente, pero observa que es "claramente dual". A la clara mejora en las ayudas y "resarcimientos materiales" a las víctimas, Covite contrapone "un compendio de deseos y buenas intenciones" que acoge con "precaución y cautela" y de cuyo cumplimiento duda. Una incredulidad que se alimenta, dice, por la falta de autocrítica del Gobierno tripartito por su desatención anterior a las víctimas y por "las políticas diarias", como el plan de Educación para la Paz y los Derechos Humanos, cuyo enfoque y contenidos rechaza.
